Un fenómeno imprevisible
La tormenta fue tan repentina que resultó muy difícil rastrearla. ¿Cómo es que los rayos acaban golpeando la tierra?
Si bien estaban anunciadas fuertes tormentas para la zona de la costa bonaerense, el temporal que se desató sobre Villa Gesell tomó a muchos por sorpresa. Los nubarrones se formaron rápidamente sobre el mar y enseguida comenzaron las precipitaciones.
Los tres rayos que cayeron sobre el balneario Afrika fueron producto de una repentina tormenta aislada con un gran movimiento de aire y agua y mucha actividad eléctrica, explicaron desde el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
“Cuando se forman masas de aire húmedo tan repentinas, suceden dos cosas: en primer lugar, no se puede prever ni calcular cuánto lloverá ni cuánta agua se precipitará. Pero también, se trata de lluvias de alta actividad eléctrica” comentó a Hoy el meteorólogo Marcelo Echagüe
En esta línea, Claudia Campetella, meteoróloga del Servicio Meteorológico Nacional, comentó que se trató de una tormenta aislada de repentino desarrollo y un fuerte movimiento ascendente y descendente de aire y agua que al llegar a la superficie provocó ráfagas muy intensas. También, la especialista aclaró: “El fenómeno, no se pudo detectar vía radar porque éste no tiene alcance hasta la zona, por lo que fue seguido por imagen satelital”.
“Los rayos están asociados a desarrollos de sistemas nubosos conectivos, de crecimiento vertical. Se inician y en ese momento se puede dar electrificación y después se disipan”, ilustró Echagüe, al tiempo que describió: “El proceso se da porque las nubes contienen cristales de hielo que suben con las corrientes ascendentes hasta adquirir una carga negativa. Cuando comienzan a bajar, chocan con cargas negativas. Por eso, en la base de la nube se genera una gran actividad eléctrica que puede termina generando descargas a tierra”. En el caso de esta tormenta en particular, el especialista relató que se trató de un caso en que se conjugan todos los elementos para que se produzcan las descargas eléctricas y comentó, que si bien resta que se lleve adelante la investigación, el hecho de que los rayos hayan caído en medio del balneario no indicaba la ausencia de un pararrayos, sino que en realidad demostraban la gran carga eléctrica de la tormenta.
Cuando esta actividad eléctrica se desata, puede traer consecuencias muy severas, por eso, el especialista recomendó que la población debe que saber cómo reaccionar ante un evento de estas características (ver página 13). “Es prácticamente imposible determinar dónde va a caer un rayo, por eso, hay que ser conscientes cada vez que se aporxima una tormenta de este estilo”, concluyó.
Un peligro silencioso
Al contrario de lo que se piensa, ocho personas han fallecido en nuestro país sólo en el último año como consecuencia de la caída de rayos. Hace exactamente un año y dos días, el 8 de enero de 2013, Adriana Romero murió en Puerto Madryn tras recibir el impacto mientras tomaba mate con su esposo en la playa “La Cantera”. Días después, un operario de la empresa Vale falleció, mientras trabajaba cuando le cayó un rayo en Ingeniero White.
En el mismo mes, otro caso se produjo en la localidad de Bajada del Agrio (Neuquén), donde un ciclista murió como consecuencia de la descarga que lo impactó mientras se encontraba descansando en la plaza de esta localidad. El 30 de marzo, un adolescente de 14 años murió en el balneario de Monte Hermoso al ser fulminado por un rayo, en el marco de una fuerte tormenta de lluvia, viento y granizo.
En mayo, el feroz fenómeno fue sobre el cuerpo Rubén Segovia, un trabajador rural que murió en el sureste de la provincia de Córdoba, luego de ser alcanzado por un rayo en medio de una fuerte tormenta eléctrica. En tanto, en octubre, la provincia del Chaco tuvo su saldo fatal: la descarga eléctrica producida impactó en el colegio Eduardo Abaroa del municipio de Macharetí. Un estudiante de 13 años murió y otros cinco resultaron heridos.
En Entre Ríos, un joven murió luego de una trágica tormenta ocurrida el 13 de noviembre. La víctima estaba pescando con un amigo y falleció en forma instantánea. Ambos jóvenes estaban pescando cerca de la localidad de Villa del Rosario. Se habían guarecido de la lluvia debajo de un árbol antes del accidente. La víctima fue Edgard Markovic y falleció de forma instantánea.
Hace menos de un mes, el 12 de diciembre de 2013, un trabajador rural de 36 años falleció en el acto cuando un rayo lo impactó de lleno mientras cargaba combustible en una cisterna en un campo al norte de la localidad cordobesa de Serrano.
Este nuevo año, no se había producido ninguna tragedia asociada a este fenómeno, sin embargo, esto cambió la trágica tarde de ayer. Por eso, algunos sectores han comenzado a reclamar al Estado Nacional que ponga en práctica un sistema de defensa más efectivo y que además, establezca un registro de todas las víctimas de las descargas eléctricas.