Vecinos molestos por comisarías desbordadas de autos y chatarras

La problemática se replica en varios puntos de la ciudad. Los autos arrumbados en las comisarías se han vuelto parte de una molesta cotidianeidad para los platenses que reclaman sin ser escuchados.

Abollados, incendiados, destartalados, tapados de tierra, e incluso, algunos casi nuevos. Así reposan los vehículos en la vía pública ocupando lugares de estacionamiento, entorpeciendo la circulación y contaminando el medio ambiente.

“Cuando vuelvo a la noche, trato de evitar esa cuadra, porque hay algunos de esos autos que están abiertos. Tranquilamente, se puede esconder una persona ahí adentro para robar. Tanto hablan de la seguridad y de la protección a los vecinos, y estas cuadras se convirtieron en una guarida para los chorros”, expresó Macarena a este multi­medio, vecina de la comisaría Segunda, de calle 38 entre Plaza Olazábal y 8.

La sobrepoblación automovilística también genera basura, que se acumula debajo imposibilitando una correcta limpieza.

Además, los vidrios rotos permiten el ingreso del agua de lluvia convirtiéndolos en reservorios para la proliferación de insectos.

En Ensenada, los habitantes de la zona de la comisaría Tercera de El Dique manifestaron un gran hartazgo. Juan Carlos, comerciante de la cuadra, se comunicó con diario Hoy y contó: “Como el sector está totalmente colapsado, fueron extendiendo el dominio por toda la cuadra, y ya hay más de 27 autos. A veces, tenemos los patrulleros arriba de la vereda de nuestras casas, porque ni ellos tienen lugar para estacionarlos. Realmente, no sé qué esperan para sacarlos”.

El cementerio de coches dificulta el paso de peatones, ciclistas y automovilistas. Desde la fuerza de seguridad, los efectivos reconocen que “la alternativa sería guardarlos en depósitos judiciales”, aunque admiten que “muchos de ellos también están colapsados”.

“Los autos están hace muchísimos meses en la esquina donde se ubica la comisaría Tercera. Están directamente sobre la calle, quitando espacio para la circulación. Además, por ahí pasa un micro, complicando aún más el tránsito", expresó Milagros, vecina de la dependencia de calle 96 y 129 de El Carmen (Berisso).

En Los Hornos, las mayores consecuencias de la problemática la sufren los comerciantes. Más de una veintena de vehículos ocupan las dos manos de la avenida 137 perjudicando a los clientes que no pueden estacionar. “Hace meses que venimos sufriendo este padecimiento y nadie se ocupa. Se echan la responsabilidad entre la Municipalidad y la Justicia, y al final, los perjudicados somos nosotros”, afirmó Martín, comerciante del barrio.
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