Volver al Juguete: padre e hija unidos por la fantasía retro

Desde hace casi cinco años, Emiliano Filgueira y su hija Kiary unieron su pasión por los juguetes retro y decidieron armar su propio canal de YouTube. Desde entonces, en cada uno de sus videos recorren ferias, exposiciones, museos y casas de coleccionistas donde lucen como trofeos las figuras de personajes como He-Man o las Tortugas Ninja. “Hacer Volver al Juguete con Kiary es algo único”, dijo Emiliano. “No todos los padres tienen la oportunidad de compartir tantas cosas. En nuestro canal yo represento al pasado y ella es el futuro. Juntos hacemos un hermoso presente”, añadió.

Volver al Juguete nació en un momento crítico para la familia. Los médicos detectaron que uno de los dos riñones de Kiary no había crecido y comenzaba a tener problemas con las proteínas. Por entonces, mientras recorrían médicos y le extirpaban el riñón, la propia Kiary propuso fundar un canal de YouTube para hacer lo que siempre habían compartido, la pasión por los juguetes antiguos.

“Desde que ella era muy chiquita, solíamos ir al Parque Centenario y al Parque Rivadavia para pasear”, recordó Emiliano. “Ya entonces le gustaban mucho los juguetes retro. No quería casi que le compre juguetes en jugueterías: le gustaba ir al parque. Le gustaba la compra y venta. Llevaba los que ya no usaba y, con lo que sacaba, compraba otros nuevos. Así que cuando empezamos a grabar los videos, decidimos hacer lo que ya hacíamos pero grabarlo. Fuimos a los parques, ferias y eventos. Y así arrancamos, en un momento de muchísimo estrés, esto nos ayudó muchísimo. Cada vez que teníamos que ir a los médicos, aprovechábamos para hacer videos. Eso nos distraía y nos llevaba a otro universo”, explicó.

En Volver al Juguete, padre e hija armaron su dupla alrededor de un juego compartido. Para cada uno, significa algo distinto; para los dos es un lazo. Con más de un centenar de videos en su haber, Kiary ya entrevé un futuro en los nuevos medios de comunicación y las redes sociales. Para la generación de Emiliano, sin embargo, parece concentrar otro sentido. Así, el coleccionismo de las figuras lanzadas en las décadas de los 80 y 90 ha alcanzado un auge inesperado, que tiene su síntoma en el éxito de las sagas de Marvel y DC pero también en la fabricación actual de viejas figuras vintage.

“Lo que busca la gente en los juguetes retro es un modo de escape”, explicó. “Sacarse el traje gris de la adultez y ponerse colores. Lo que vimos muchísimo durante nuestra infancia son estos personajes de dibujos animados y todos en el mismo televisor, porque no existían tantos medios como existen hoy. Entonces todos a las cinco de la tarde mirábamos los mismos dibujos. Teníamos los mismos héroes. Se busca esa nostalgia. Volver a la infancia. Volver a ser chicos, remarcó.

Tal como revelan Emiliano y Kiary a través de su canal, los coleccionistas buscan afanosamente la figura original, con su correspondiente blíster de empaque y el arte del cartón en el mejor estado posible. Persiguen a Leon-O, Skeletor, Mazinger Z o cualquiera de las cuatro Tortugas Ninja, incluso Dragon Ball, los Super Campeones o los Power Rangers. La valoración de un ítem, en ese sentido, cambia drásticamente de acuerdo a si se encuentra sellado o a luz (es decir, fuera de su empaque original).

“Cuando pone sus figuras con distintos personajes en la estantería, lo que está tratando de hacer es inmortalizar momentos”, contó Emiliano. “El mundo de hoy va muy rápido. Estamos todos muy ansiosos, con problemas, tratando de buscar cables a tierra. Y esto es un cable a tierra. Empezar a buscar a nuestros héroes de la infancia y tratar de sentirnos identificados con ellos. Por ejemplo, en aquel momento He-Man y los Pitufos transmitían mensajes muy lindos que hasta hoy los recordamos. Hoy en día está todo tan machado que a veces cuesta limpiarlo. En un mundo sin héroes, tal vez inconscientemente busquemos un regreso a los héroes de nuestra infancia”, concluyó.

Desde los Gremlins hasta los Supercampeones

De acuerdo al trabajo de campo que vienen realizando Emiliano y Kiary desde Volver al Juguete, si bien hay coleccionistas en la veintena, en su gran mayoría tienen desde 30 años hacia arriba. Así, las colecciones de cada uno están signadas por los grandes momentos de fantasía de cada generación.

“Entre los más jóvenes, están aquellos que buscan Super Campeones, Pokemon, Dragon Ball, Power Rangers. Los coleccionistas con 40 vamos más para lo que era He-Man, Mazinger Z, Meteoro, Star Wars, Gi-Joe, los Thundercats, los Pitufos. También hay una generación intermedia, que hoy tiene treinta y pico de años, muy copada por las Tortugas Ninjas, que en esa época se comieron todo. Fue genial”, comentó.

Asimismo, las franquicias de algunas películas generaron una gran cantidad de merchandising con mucho valor en el mercado de los juguetes retro. Son las sagas como Star Wars, Terminator, los Gremlins y las distintas encarnaciones de Jason y Freddie Krueger en Pesadilla y Viernes 13. “Todas esas piezas se van valorando cada vez más a medida que pasa el tiempo”, contó Emiliano.