¿Cómo votaron los candidatos?
Trump, el abucheado
Cerca de las 11 (13, hora argentina) de ayer, el candidato presidencial republicano, Donald Trump, emitió su voto en la Escuela Pública 59, ubicada al este de la ciudad de Nueva York, en medio de un gran operativo de seguridad y rodeado por un millar de personas que lo abuchearon tanto a su llegada como cuando se retiró.
“Todo pinta bien, las cosas están saliendo muy bien”, dijo confiado ante la prensa que se encontraba en el interior del centro de votación, poco antes de depositar su voto.
“Vamos a ver qué pasa (...) va a ser un día interesante”, manifestó el candidato republicano instantes después de depositar su boleta en el interior de una sala abarrotada de personas, en la que se pudieron escuchar gritos en su contra.
Polémico hasta el último minuto del acto electoral, el republicano, incluso, tuvo una curiosa reacción en el momento en que votó su mujer, Melania.
Luego de emitir su voto, el candidato presidencial ojeó la pantalla de su mujer mientras elegía, celoso de que lo votara a él. Las cámaras captaron ese momento y el video se volvió viral.
Para dar su voto, Trump arribó en una camioneta 4X4 y una caravana de otros once vehículos que alteraron la tranquilidad del lugar, ubicado a pocos minutos del Times Square de Manhattan.
Al igual que al llegar, el magnate neoyorquino, vestido con un traje oscuro y corbata celeste, saludó con su brazo en alto al retirarse junto con su esposa Melania y su hija Ivanka.
El oriundo de Queens también se paró en la parte inferior de la puerta del auto para un último saludo, antes de perderse en el interior del vehículo blindado y con vidrios polarizados. Entonces, un centenar de personas lo despidió con un severo: “Nueva York te odia”.
Clinton, la madrugadora
Espero ganar”, se esperanzó la candidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Hillary Clinton, cuando ayer, bien temprano, emitió su voto en un centro de votación de Chappaqua, Nueva York, acompañada por su marido, el expresidente Bill Clinton.
“Hay mucha gente involucrada en esto y una gran responsabilidad en juego”, agregó la referente poco después de depositar su voto, hacia las 8 (10, hora argentina).
Vestida con pantalón, saco, blusa color plomizo y zapatos al tono, la exsecretaria de Estado y ex primera dama votó en la escuela secundaria Douglas G. Grafflin, ubicada al norte de la ciudad de Nueva York, en el condado de Westchester, donde fijó su residencia para poder presentarse como candidata a senadora por Nueva York, con un mandato que mantuvo entre 2001 y 2009.
La demócrata acudió al centro de votación dos horas después de que abrieran los colegios electorales en la costa este de Estados Unidos. Allí, la esperaban fotógrafos y curiosos que utilizaban continuamente sus celulares para inmortalizar el momento.
Con aire desenfadado y sonriente, los Clinton saludaron a funcionarios y trabajadores que se encontraban allí, y se mantuvieron en el centro de votación durante 10 minutos.
En las afueras del local, Hillary volvió a saludar a sus partidarios, antes de entrar a la camioneta que la trasladaba.
También, depositó su voto el compañero de fórmula, Tim Kaine, quien lo hizo poco después de la apertura de las urnas en su localidad natal de Richmond, Estado de Virginia.
Eric Trump y un “voto cantado”
Eric Trump, uno de los hijos de Donald Trump, violó ayer una ley estatal de Nueva York al publicar en su cuenta oficial de Twitter una foto del voto que emitió por su padre, un hecho que podría costarle una multa o un período tras las rejas.
“¡Es un honor increíble votar por mi padre! ¡Hará un trabajo tan bueno por Estados Unidos!”, escribió Eric, de 32 años, en la red social, junto a una foto de su boleta, en la que aparecía marcada la opción de “Donald Trump”.
El joven después borró el mensaje, pero la noticia ya circulaba por redes sociales y medios.
Nueva York es uno de los 18 estados del país donde sacarle una foto a la boleta o tomarse una foto con ella es ilegal.
Mientras que algunos estados tienen legislaciones más ambiguas sobre el tema, en Nueva York es ilegal mostrar “a cualquier persona” la papeleta preparada para votar, algo catalogado como un “delito menor” bajo una ley estatal aprobada hace 126 años.
Violar dicha ley puede conllevar una multa de 1.000 dólares o incluso un año de cárcel, según la Junta Electoral de Nueva York.