El papa Francisco advirtió sobre el acoso escolar
Fue ayer durante una audiencia con varias asociaciones italianas de maestros y educadores. El pontífice elogió los esfuerzos desde las instituciones para promover la paz y combatir el bullying.
El papa Francisco advirtió que el acoso escolar en las escuelas prepara a los estudiantes para la guerra en lugar de para la paz, en un discurso dirigido a educadores católicos reunidos en el Vaticano en la jornada de ayer.
Hablando ante unos 2.000 profesores, educadores y padres italianos, Francisco enfatizó su mensaje contra el acoso escolar, pidiendo al público que se comprometa a luchar contra ese flagelo tanto en la escuela como en casa.
“Pero si, en la escuela, os hacéis la guerra entre vosotros o participáis en el acoso, os estáis preparando para la guerra, no para la paz”, sostuvo el pontífice.
A su vez, lamentó que haya niños sin educación, "que van a trabajar, muchas veces explotados, y que buscan comida o cosas para vender entre los desechos".
Además, elogió los esfuerzos educativos en las escuelas para promover la paz, señalando que “imaginar la paz” sienta las bases para “un mundo más justo y fraterno” a través de “cada asignatura enseñada y mediante la creatividad de los niños y jóvenes”.
El papa también hizo un llamado a un mayor diálogo dentro de las familias, enfatizando que “es el diálogo lo que nos hace crecer”. También animó a transmitir a los alumnos “una nueva cultura basada en el encuentro entre generaciones” y la “responsabilidad personal y colectiva para afrontar retos globales como las crisis ambientales, sociales y económicas”.
Esta semana el papa advirtió de una "catástrofe educativa" a nivel mundial, aseguró que hasta 250 millones de niños están sin acceso a la educación y dedicó sus intenciones de oración para enero al derecho a la instrucción de migrantes, refugiados y personas afectadas por las guerras.
En ese marco, afirmó que “todos los niños y jóvenes tienen derecho a ir a la escuela, sin importar su situación migratoria”. También reiteró que la educación es clave para prevenir la discriminación, la delincuencia y la explotación, y para integrar a los migrantes en la sociedad.