Horror en Etiopía
Revelan limpieza étnica en Tigray
Miles de civiles fueron masacrados por soldados de Eritrea y de ese país, según informes de Amnistía Internacional y de Estados Unidos. Los gobiernos de Eritrea y Tigray se niegan a retirar sus tropas.
Los informes son espeluznantes: miles de civiles masacrados en la región de Tigray, en el extremo Norte de Etiopía, en el límite de ese país africano con Eritrea. Los habitantes de Tigray, bajo control militar eritreo, se encuentran justo en medio de un conflicto que involucra a ambas naciones. Tropas de Eritrea y de Etiopía asesinaron a balazos a multitudes de inocentes, incendiaron viviendas, violaron a mujeres y obligaron a decenas de miles a huir al vecino país de Sudán, donde permanecen refugiados, con las imágenes del horror impresas para siempre en sus mentes.
Aun así, tanto Eritrea como Etiopía se niegan a retirar sus tropas de Tigray, a pesar de que sendos informes de la organización pacifista Amnistía Internacional y del gobierno de los Estados Unidos revelaron los horrores desplegados en esa región desde fines del año pasado, en lo que se considera una campaña de limpieza étnica.
El reporte del gobierno estadounidense dice que soldados de la vecina región de Amhara, al sur de Tigray, que apoyan al primer ministro Abiy Ahmed, están “convirtiendo deliberada y eficientemente a Tigray Occidental en una región étnicamente homogénea a través del uso organizado de la fuerza y la intimidación”, y que “pueblos enteros fueron gravemente dañados o completamente borrados”.
El informe de Amnistía Internacional en tanto, dice que soldados de Eritrea también ejecutaron sistemáticamente a cientos de civiles tigrayanos en la antigua ciudad de Axum. A algunos les dispararon en la calle.
Los soldados eritreos “quemaron nuestros cultivos, después empezaron a quemar las casas. Y después dijeron que me iban a quemar a mí, así que huí para salvar mi vida”, dijo un agricultor tigrayano a Vice. “Les dispararon a todos. Hasta mataron a curas que se habían escondido en la Iglesia.”
El líder del Frente de Liberación del Pueblo de Tigray (FLPT), Debretsion Gebremichael, pidió que una misión independiente registre los crímenes cometidos por tropas etíopes y eritreas. El FLPT mantuvo el control sobre el territorio hasta que grupos étnicos de Oromo y Amhara se unieron contra el partido.
El gobierno de Abiy Ahmed desacreditó el informe de Amnistía Internacional y se rehusó a retirar sus tropas de la región.
Ahmed recibió el Premio Nobel de la Paz en 2019 por su iniciativa para resolver el conflicto con Eritrea. En noviembre último, lanzó un ataque sorpresivo en la región nórdica, y aparentemente Eritrea colaboró en los ataques a la región. Desde entonces, la pesadilla de los tigrayanos no cesa, y decenas de miles han tenido que huir a Sudán, donde fueron alojados en campamentos provisorios.