Una ola de calor golpea a los Estados Unidos con temperaturas de 47°C
Los expertos señalan que el fenómeno es “extremadamente peligroso” y alertaron por la calidad del aire en varias regiones del país.
El cambio climático impacta de lleno en el mundo, sea por sus extremas temperaturas bajo cero o por las olas de calor que provocan serios problemas de salud y en los suelos. Este último es el caso de los Estados Unidos, golpeado por las altas temperaturas que, ya prevén, serán récord.
El Servicio Meteorológico Nacional estadounidense indicó en un comunicado esta mañana que “se espera que una ola de calor abrumadora y extremadamente peligrosa azote el oeste este fin de semana, así como partes del sur”.
“Es probable que se registren varios récords de temperatura, y los problemas de calidad del aire serán habituales en varias regiones de Estados Unidos”, añadió el organismo.
Las temperaturas extremas alcanzan a unos 90 millones de personas y prevén que se mantenga de ese modo por varios días más. Uno de los estados más afectados es Arizona, donde ya llevan once días con temperaturas que superaron los 43° y hasta esperan, para este domingo, tocar los 47°C.
En tanto, en el sur de California, los bomberos luchaban desde el viernes contra varios incendios muy violentos que arrasaron más de 1.214 hectáreas y provocaron la evacuación de la población.
Feroces incendios también se registraron en Canadá, que limita al norte con los Estados Unidos, también como producto de esta ola de calor. Allí se incendiaron ya 10.000 hectáreas. “Nos encontramos este año con cifras peores que nuestros escenarios más pesimistas”, dijo Yan Boulanger, investigador del Ministerio de Recursos Naturales de Canadá, quien consideró “una completa locura que no ha habido respiro desde principios de mayo”.
Pero los fenómenos climáticos varían de uno y otro lado de la frontera. Así, en Vermont, se produjeron inundaciones “históricas y catastróficas” como consecuencia de las lluvias torrenciales.
Además, los incendios en Canadá volvieron a enviar columnas de humo hacia el vecino del sur y varios estados del norte de Estados Unidos, como Montana y Dakota del Norte, tuvieron niveles “nocivos” de calidad del aire.
“Tormentas eléctricas de fuertes a violentas, lluvias torrenciales e inundaciones son posibles en varios lugares, en particular y desgraciadamente en Nueva Inglaterra, que ya está saturada” por las recientes precipitaciones, según el Servicio Meteorológico.