El operativo “fraude” del liberalismo y el antecedente de Trump y Bolsonaro

Desde el entorno de Javier Milei, reaniman las denuncias por irregularidades en el sistema electoral a días del balotaje. El caso de Brasil y Estados Unidos, y el impacto en el futuro gobierno.

"No fueron elecciones limpias”. Estas palabras fueron vertidas por el candidato a presidente de La Libertad Avanza, Javier Milei, quien se pronunció por primera vez sobre el “fraude” que se encargó de denunciar la tropa liberal desde el momento en que de consolidó su derrota en las elecciones generales a manos del presidenciable de Unión por la Patria, Sergio Massa.

“Hubo irregularidades de semejante tamaño que ponen en duda el resultado”, sostuvo, sin más, Javier Milei en una reciente entrevista otorgada al periodista peruano Jaime Bayly. El liberal no se quedó solo en las mencionadas acusaciones, sino que aseveró también que la Cámara Nacional Electoral (CNE) “está muy influenciada por el poder político” y puso en duda el resultado que pueda arrojar la segunda vuelta del próximo 19 de noviembre. “No lo podemos aceptar”, expresó. Las recientes declaraciones del aspirante a la Casa Rosada se suman a la ola de expresiones de referentes de su entorno que durante los últimos días pusieron la segunda marcha del “operativo fraude”, que hasta el momento se enfrascaba en las redes. “Hubo trampas, no tenemos dudas”, expresó el vocero de La Libertad Avanza, Guillermo Francos, y precisó que sus acusaciones parten de un “análisis comparativo” que hicieron con base en las planillas de la última vuelta electoral.

Uno de los flancos por lo que los liberales atacaron fue por las miles de planillas en las que figuraban que el economista había sacado cero votos. Frente a este escenario, un informe del Centro de Investigación para la Calidad Democrática (CICad) muestra que las cifras publicadas por la Dirección Nacional Electoral arrojan que Unión por la Patria, Juntos por el Cambio y La Libertad Avanza registraron una cantidad similar de telegramas electorales que arrojaban “cero votos”.

Más allá de la ola de denuncias que inundaron las redes sociales, La Libertad Avanza no presentó ninguna denuncia formal ante la Justicia Electoral sobre presuntas irregularidades.

La Cámara Nacional Electoral (CNE) lanzó un comunicado en el que alertaban por las “invocaciones de fraude sin fundamento que en estos días desinforman a la opinión pública y socavan a la democracia como sistema de creencias compartidas”.

A su vez, el exdirector Nacional Electoral, Alejandro Tullio, estimó que Milei “indudablemente está mal informado por sus colaboradores” y remarcó que, durante el proceso electoral, los fiscales y apoderados de LLA aceptaron los resultados de cada una de las 104.520 actas que se desplegaron a lo largo y ancho del país. “No apelaron una sola de las actas”, expresó.

En este sentido, el miembro de la Red Mundial de Justicia Electoral evaluó que la intención de MiIei, de instalar la idea de fraude, marca “una contradicción entre los actos de

los apoderados y fiscales y los dichos a los que se refiere Milei”.

El antecedente de Bolsonaro y Trump

La campaña liberal que fue ratificada por Milei reúne aspectos similares a las que desplegaron Jair Bolsonaro en Brasil y Donald Trump en Estados Unidos que culminaron en el asalto del Palacio del Planalto y el Capitolio a manos de seguidores partidarios. Ambos líderes son los espejos en los que se refleja Milei.

No es menor que uno de los invitados principales del búnker del economista liberal, el pasado 22 de octubre, fue el diputado brasileño Eduardo Bolsonaro, hijo del exmandatario brasilero, quien también acompañó al diputado bonaerense Nahuel Sotelo a emitir su voto. “El fenómeno que se ve en las calles es el mismo” que el que se vivió en Brasil en 2018, señaló el liberal respecto a los puntos en común de la coyuntura nacional y la antesala al arribo de Bolsonaro al poder que terminó abandonando cuatro años después denunciando fraude de su contrincante Luiz Inácio Lula Da Silva.

Bolsonaro nunca reconoció la derrota electoral, hizo bandera del fraude y se lo señala como artífice del intento de Golpe de Estado que se desarrolló en Brasil el 8 enero del 2023, cuando centenares de ciudadanos irrumpieron en el Congreso e intentaron tomar el Palacio de Planalto —sede del Ejecutivo— en rechazo a la victoria de Lula Da Silva.

Escenario similar se había generado en los Estados Unidos, donde el presidente saliente, Donald Trump, rechazó la derrota frente a Joe Biden y sus seguidores irrumpieron en el Capitolio a fin de interrumpir una sesión conjunta del Congreso para contar el voto del Colegio Electoral y certificar la victoria del Demócrata. “Se trataba de unas elecciones amañadas y robadas, y de un país que estaba a punto de ir al infierno”, dijo Trump meses después del hecho.

Milei ha sido elogiado por referentes de la derecha estadounidense, en especial luego de haber sido entrevistado por el periodista Tucker Carlson. “Milei entiende perfectamente que Occidente está en guerra y que si la izquierda no es aplastada, no habrá libertad económica, social o personal para las generaciones venideras”, señaló Roger Stone, el exasesor de campaña de Donald Trump, Ronald Reagan y Richard Nixon. Incluso, subrayó que es el “líder más parecido a Trump que actualmente está en ascenso en el escenario mundial”.

Con una base electoral de casi 8 millones que se puede estirar por encima de los 10 millones —es decir, casi un cuarto de la población— una hipotética derrota del liberal envuelta en denuncias por fraude abriría paso a un complejo escenario de ilegitimidad con el que tendría que convivir el próximo Presidente y significaría, también, un golpe duro al sistema democrático que aún está en proceso de fortalecimiento.

Noticias Relacionadas