El papelón de Macri y Vidal

El presidente de la Nación y la gobernadora eligieron la planta avícola Cresta Roja para hablar de la importancia de la recuperación del trabajo y anunciar el veto a la ley antidespidos, justamente donde fueron reintegrados 1300 de 3500 operarios, los que cobran un 20 por ciento menos de sueldo y con precarios contratos. Una protesta sindical les hizo pasar un mal momento

El presidente Mauricio Macri, al lado de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal y el ministro de Trabajo de la Nación, Jorge Triaca, anunció ayer que vetó la ley antidespidos. Lo hizo con una puesta en escena en la planta avícola Cresta Roja ubicada en la localidad de Esteban Echeverría, en la que los dos mandatarios protagonizaron un papelón. Es que eligieron como símbolo de la recuperación del trabajo real una empresa que quebró y que al reabrirse solo fueron reincorporados 1300 de 3500 operarios, los que cobran un 20 por ciento menos de salario y con contratos precarios.

Además, el Presidente y la Gobernadora fueron increpados por trabajadores judiciales (a los que no supieron qué contestar), quienes llevan adelante una extensa protesta en reclamo de un aumento salarial digno, y por el que el servicio de justicia está casi totalmente paralizado en la Provincia. 

"Hoy (por ayer), en uso de esta facultad constitucional que tengo, voy a vetar la ley que para mí es anti-empleo. Una ley contra los argentinos, una ley que demuestra que no confiamos en nuestro futuro", sostuvo el mandatario, quien así puso fin al anticipado rechazo del Poder Ejecutivo a la iniciativa sancionada por el Congreso en la madrugada del pasado jueves.

Desde la planta avícola, el jefe de Estado apuntó contra el kirchnerismo por impulsar la ley que prohibía los despidos por 180 días y establecía la doble indemnización: "¿Por qué la impulsan? Porque desde la política quieren ponernos palos en las ruedas, no quieren que progresemos, no quieren que tengamos estas nuevas oportunidades", denunció.

Macri, por la tarde estampó finalmente su firma en el veto que saldrá publicado el próximo lunes en el Boletín Oficial.

Como se dijo, el escenario y el momento elegidos para hacer el anuncio lejos estuvo de ser casual: la planta avícola, que quebró en los últimos meses de la gestión de Cristina Kirchner, celebró la reincorporación de otra tanda de los empleados que habían quedado sin trabajo por la crisis de la empresa.

El 21 de abril pasado Macri reinauguró la producción de Cresta Roja. “Quise volver acá porque esta es una demostración de cómo tenemos que trabajar. Cresta Roja fue otra de las cosas rotas que nos dejó el Gobierno saliente: una empresa que estaba quebrada, había abandonado su tarea. Y no sacamos una ley arbitraria, no impusimos un decreto", concluyó.

Lo que no dijo el Presidente es que solo retomaron al 37 por ciento de los empleados, casi uno de cada tres trabajadores, que le bajaron el sueldo y no les dieron garantías de estabilidad. ¿Esa es la demostración del modelo económico del gobierno nacional?

Al respecto, la diputada Cecilia Moreau, le pidió al Ejecutivo nacional que presente propuestas serias de recuperación económica. “La gente tiene hambre, hay desempleo, bajan todos los índices de producción. Necesitamos un compromiso real de recuperación”, dijo la legisladora.

La protesta de los judiciales

Empleados judiciales bonaerenses realizaron ayer una protesta en la puerta de la planta avícola Cresta Roja mientras el presidente  Macri oficializaba su decisión de vetar la ley antidespidos. 

Integrantes de la Asociación Judicial Bonaerense (AJB) reclamaron aumentos salariales y mejoras en las condiciones laborales, en el marco de un conflicto que se extiende desde hace varias semanas en la Provincia de Buenos Aires.

Los manifestantes se acercaron hasta la puerta de Cresta Roja, hicieron sonar sus bombos y mostraron pancartas con leyendas con críticas al jefe de Estado y a la gobernadora Vidal.

La gobernadora volvió a hablar de diálogo y la insultaron

La mandataria bonaerense, María Eugenia Vidal, aseguró ayer tras participar de la apertura de la Semana Social en el Hotel 13 de Julio de Mar del Plata, organizada por la comisión episcopal de Pastoral Social, que "el verdadero camino para preservar el trabajo es el diálogo".

La afirmación resulta absurda en el marco del fuerte conflicto salarial que se da en la provincia de Buenos Aires, en la que un frente sindical le demanda a Vidal la apertura de las paritarias para llevar adelante negociaciones salariales, y a horas de la contundente manifestación realizada en La Plata con miles de participantes.

De hecho, hasta tuvo que intervenir la Justicia para que el gobierno convoque a algunos gremios a reabrir unas paritarias cerradas en forma unilateral e irregularmente, con un acotado aumento del 12 por ciento de bolsillo para millones de estatales bonaerenses.

Vidal fue recibida con insultos en la puerta del hotel sindical donde se desarrolló el encuentro por una protesta de trabajadores de los gremios Soeme y AJB, entre otros.

Hoy, el turno de los sindicalistas

El encuentro de la Semana Social continuará hoy con distintos paneles pero el plato fuerte será a las 19 con la presencia de los titulares de las cinco centrales sindicales, quienes expondrán en un panel sobre la "unidad sindical".

Según adelantaron los organizadores, estarán presente los líderes de las CGT Azopardo, Hugo Moyano; la CGT Alsina, Antonio Caló; la Azul y Blanca, Luis Barrionuevo; de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), Hugo Yasky; y de la CTA Autónoma, Pablo Micheli.

Por la noche, los sindicalistas compartirán una cena con los obispos y sacerdotes integrantes de la Pastoral Social en el mismo hotel sindical.