Kicillof se corre de la escena y apuesta a la apertura de sesiones

Axel Kicillof resolvió postergar toda su actividad política hasta la apertura de sesiones ordinarias de la Legislatura bonaerense, programada para el 5 de marzo. La determinación incluyó la suspensión definitiva del acto en Mar del Plata, que ya había sido reprogramado, y la cancelación de encuentros en Junín y San Nicolás. Según fuentes cercanas, el mandatario quiere evitar distracciones y reforzar su imagen de gestión en medio del escándalo que golpea al Presidente Javier Milei.

“No habrá actos políticos hasta después de la Asamblea Legislativa. Todo está concentrado en la gestión”, afirmaron desde Gobernación. La pausa también responde a la incertidumbre electoral, ya que aún no está claro si el Senado aprobará la suspensión de las PASO esta tarde, una variable clave para definir la estrategia en Buenos Aires.

En el entorno del gobernador coinciden en que este no es el momento para despliegues políticos cuando la Casa Rosada enfrenta una crisis creciente por las denuncias sobre el manejo del token $LIBRA. “El foco debe seguir puesto en los problemas de Milei”, reconoció un dirigente alineado con Kicillof. Tras el discurso en la Legislatura, el mandatario retomará los plenarios seccionales y podría lanzar un espacio político propio. Mientras tanto, referentes sociales y sindicales preparan un documento de respaldo a su liderazgo, que espera el momento oportuno para salir a la luz.