La crisis local estalló en Juntos por el Cambio: tensión en el Palacio Municipal
Circulan rumores de ruptura en el bloque de concejales del oficialismo platense, tras la interna de la UCR. Los “boinas blancas” no dieron quórum en la sesión del último lunes. Cambiemos tuvo que negociar con el Frente de Todos, que modificó el Presupuesto 2023.
Casi como un acto reflejo de lo que pasa en el escenario nacional y provincial, en La Plata las tensiones y discrepancias reinan en el armado político de Juntos por el Cambio (JxC). El oficialismo comandado por el intendente Julio Garro ya comenzó a discutir puertas adentro las precandidaturas para el año próximo y, en ese marco, los radicales comenzaron a hacer valer sus pretensiones desatando un caos político inusitado.
Son días convulsionados en el Palacio Municipal. Como se sabe, el “garrismo” integró en su estructura de gobierno a dirigentes del radicalismo, la Coalición Cívica y sectores marginales del peronismo platense. Pero la convivencia es cada vez más forzada y, como botón de muestra, el lunes pasado la crisis estalló en el Concejo Deliberante, habitual caja de resonancia política de los movimientos del Ejecutivo.
Los cortocircuitos en la tropa cambiemista no son nuevos: desde que promediaba la primera gestión de Garro –allá por 2017–, los tironeos y disputas palaciegas estuvieron a la orden del día y siempre tuvieron como correlato las pujas por el armado de la lista seccional –que elige seis diputados cada cuatro años–, pero sobre todo la distrital –que renueva doce bancas cada dos años en el deliberante–. Como dijo un avezado observador político de la capital provincial, “las disputas entre radicales y amarillos siempre se taparon con sobres, pero no se puede barrer la basura por debajo de la alfombra”.
Nuevas autoridades y desplante de la UCR
Diario Hoy ya lo explicó en un artículo sobre la crisis interna de JxC a nivel nacional hace dos semanas. Los radicales son expertos en ejercitar las fisuras internas, y, en ese afán rupturista, trasladan esa dinámica histórica a las coaliciones que integran.
El pasado domingo, el partido fundado a fines del siglo XIX renovó sus autoridades locales. En una elección en la que votaron apenas 6.000 afiliados sobre un padrón de casi 33.000, el dirigente de Evolución, Pablo Nicoletti, se impuso por el 61% frente al 39% de los votos del espacio que postuló al exdiputado bonaerense (mandato 2009-2013) y empresario local Sergio Panella, que desde 2011 a esta parte perdió en todas las elecciones en las que participó.
El espacio de Nicoletti, que es apadrinado por el legislador porteño Martín Lousteau, fue respaldado por el propio Garro, que salió a felicitarlo a través de su cuenta de Twitter. Pero algo pasó después del domingo y la bomba le estalló a Garro en la cara tan solo 24 horas después en el recinto legislativo que funciona en la planta baja del Palacio Municipal de calle 12.
En una sesión que debía comenzar pasado el mediodía y finalmente lo hizo llegando la noche entre especulaciones, llamadas cruzadas y negociaciones, el oficialismo conducido por Darío Ganduglia, presidente del Concejo, tuvo que acudir “de urgencia” al bloque del Frente de Todos para obtener quórum y realizar una sesión crucial en la antesala del tratamiento del Presupuesto 2023.
El problema es que, de los 14 ediles propios de JxC, tres pertenecen a la UCR. El detonante: que ninguno de los tres accedió a sentarse en su banca, por lo que el bloque peronista que preside la investigadora del Conicet Yanina Lamberti, que tiene 10 escaños de los 24 totales, le tuvo que “salvar las papas” a un oficialismo desconcertado.
Hubo rumores, versiones y contraversiones en “radio pasillo”. Una especie aseguraba que ambos bloques esperaban llamados “desde arriba” para bajar a sesionar. Pasaron las horas, y los llamados nunca llegaron. Otra versión, que después tuvo estatus de certeza, sostenía que el peronismo bajaba al recinto si antes negociaba modificaciones sustanciales en la letra chica del proyecto del Presupuesto, cosa que finalmente logró.
También se hipotetizó que la interna del radicalismo no había podido resolverse a pesar de que la elección que había renovado la Junta Central ya era parte del pasado. Los radicales usaron como excusa oficial “una intromisión excesiva” de Garro en la interna del domingo.
Lo cierto es que los concejales Diego Rovella, presidente del bloque, Manuela Forneris y Verónica Rivas no dieron quórum. El primero ni siquiera se apersonó en el edificio gubernamental. Las concejalas estuvieron en el Palacio, pero a la hora de la verdad se fueron. ¿Traición de socios disconformes? Lo cierto es que, al cierre de esta edición, los rumores sobre una posible ruptura del bloque eran cada vez más sonoros. Los más optimistas sostienen que “fue una jugada del radicalismo para subirse el precio”. Lo cierto es que la nueva conducción del radicalismo quedó sumamente debilitada y la ascendencia de Garro sobre los “boinas blancas” es cada vez menos eficiente.
El comunicado del FdT
Minutos antes de comenzar la sesión, el peronismo tenía preparado un comunicado de prensa, que entregó a los medios en las últimas horas de la movida noche del lunes.
“Logramos incluir fondos por 1.000 millones de pesos con la creación del programa Fondo de Infraestructura Barrial”, informaron en uno de los párrafos más importantes los ediles del Frente de Todos (FdT), que también se refirieron al ítem educación: “Se logró crear un fondo de 50 millones para internet con la finalidad de garantizar internet en escuelas y plazas libres y conectadas de las localidades”; en tanto que otros “100 millones serán destinados a arreglos de escuelas”
Por otra parte, el planteo del bloque giró en torno a la necesidad de mejorar la calidad institucional en el funcionamiento de comisiones del Concejo Deliberante y el cumplimiento de las ordenanzas que prevén comisiones especiales para el resguardo de la discusión que permita legislar en favor de los y las platenses.
Por último, se solicitó que se concrete el “pase a planta permanente de 2.000 trabajadores municipales”, una demanda del sector que lleva años. “Son ellas y ellos quienes ponen en valor nuestra ciudad y consideramos que deben tener mejoras salariales y sus derechos garantizados”, dice el comunicado.