La explotación petrolera bonaerense continúa sumando apoyos de sectores sindicales y productivos

Es tiempo de definiciones en “La Feliz” con respecto a una actividad que bien podría cambiar el eje de la economía marplatense, como ya sucedió en Brasil en la localidad de Macau. Y mientras se aguarda el fallo de la Cámara Federal, que deberá definir si se autoriza o no la exploración petrolera a más de 300 kilómetros de la costa bonaerense, el Ejecutivo nacional recibió el apoyo de diferentes sectores sindicales, productivos, profesionales y académicos que respaldan la iniciativa.

En ese marco, el Gobierno mostró su optimismo sobre la futura sentencia y, durante la semana, el secretario nacional de Energía, Darío Martínez, firmó un convenio con la CGT de Mar del Plata para dar inicio a los cursos de capacitación a futuros trabajadores del sector, junto al Instituto Argentino del Petróleo y del Gas (IAPG) y a la Universidad Popular de los Trabajadores y Trabajadoras (UPT).

En su paso por Mar del Plata, el funcionario participó de la apertura de una presentación técnica ante universidades organizada por la empresa estatal YPF y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.

Allí manifestó que la explotación petrolera en la costa bonaerense “va a redundar en la creación de nuevos puestos de trabajo y en el desarrollo de pymes locales”, y graficó que la industria de hidrocarburos es la que cuenta con mayor multiplicación de puestos indirectos, al afirmar que “por cada trabajador petrolero se crean de cinco a seis puestos indirectos”.

El funcionario también recorrió dos astilleros del puerto marplatense y conversó con los referentes locales sobre el futuro impacto que podría tener la explotación petrolera en el desarrollo de la industria naval. También realizó una visita a las instalaciones de la empresa QM en el Parque Industrial, una pyme proveedora de equipamiento para la extracción de hidrocarburos que hoy en día provee a Vaca Muerta.

Como ya se consignó en este multimedio, la Cámara Federal de Apelaciones de Mar del Plata debe tratar la presentación realizada por el Gobierno nacional en relación a la medida cautelar impuesta por el juez Santiago Martín, que puso un freno a la explotación petrolera en la zona.

Al mismo tiempo, en poco más de una semana (el 30 de mayo) se llevará a cabo una audiencia pública en el Concejo Deliberante de General Pueyrredón –cuya ciudad cabecera es Mar del Plata–, donde se podrán escuchar las principales críticas de parte de organizaciones ambientalistas, que temen por el futuro de la ballena franca austral, cetáceos, invertebrados marinos, peces, tortugas y aves marinas, así como la actividad pesquera, todos argumentos que a su vez han sido refutados desde la otra orilla.

Hay quienes sostienen que el envío de ondas sonoras (necesarias para este tipo de explotación) podría afectar a las especies animales que se orientan a través de la ecolocalización, lo que podría impactar en su hábitat y conductas.

Sobre este punto, Martínez indicó: “Estamos convencidos de que no hay ninguna contradicción entre producción y protección del medioambiente. Creemos que con información veraz este clima tan hostil se ha ido revirtiendo y hoy mucha gente se interiorizó de los beneficios del proyecto”.

El funcionario ensayó una justificación al respecto e indicó que “muchos han criticado la extracción de gas por fracking en Vaca Muerta, pero les aseguro que es gracias a las políticas que hemos llevado desde el Gobierno nacional que hoy, en una circunstancia de guerra en Europa que ha disparado los precios del gas a valores nunca vistos, Argentina puede sobrellevar la situación”.

En 2019, el Estado nacional adjudicó 18 áreas exploratorias a nueve consorcios de empresas que comprometieron inversiones por un total de 724 millones de dólares para cubrir una superficie cercana a los 95.000 km2.

La primera en atravesar el proceso de audiencia pública fue el área CAN100, a cargo de las empresas Equinor, Shell e YPF, las que obtuvieron el permiso correspondiente para iniciar las actividades exploratorias que comenzarían a principios de 2023, pero el mismo proceso debería atravesar el resto de las adjudicatarias para cada una de las áreas.

Apoyo gremial

A pesar de las críticas de las organizaciones ambientalistas y del sector pesquero de General Pueyrredón, la CGT consideró que “la Argentina tiene la oportunidad de cambiar su perfil productivo con este tipo de proyectos y convertirse en un exportador de energía al mundo”. “El país debe encarar con seriedad el debate que se está dando en la sociedad sobre el desa­rrollo de este tipo de recursos, sin caer en falsas dicotomías y temores infundados”.

Finalmente, Pablo Trueba, secretario general del Sindicato Marítimo de Pescadores (Simape), sostuvo: “Me parece que Mar del Plata no debe dejar pasar esta oportunidad. Sobrados son los fundamentos que hay y las pruebas para tener clarito que no va a haber un impacto ambiental que lleve a envenenar las costas de Mar del Plata”.

Cabe aclarar que Trueba fue uno de los primeros en salir al cruce de quienes auguraban un futuro oscuro para la pesca, aduciendo que no se podía convivir con la actividad petrolera.

Las cartas están tiradas y el futuro inmediato dirá si Mar del Plata seguirá liderando los rankings de ­desocupación o se jugará un pleno a la actividad petrolera y la chance de dar trabajo a miles de marplatenses.