La Gestapo insiste con acomodarse en Comodoro Py
El juez de los tribunales federales porteños Martínez de Giorgi le pidió a Kreplak que la causa de la mesa antisindical pase a su juzgado para unificarse con la de espionaje ilegal en Ezeiza.
El juez Marcelo Martínez de Giorgi, a cargo del Juzgado Federal n° 8 de Capital Federal en la causa denominada “espionaje ilegal”, que se había iniciado en el fuero federal de Lomas de Zamora luego de la denuncia de maniobras de espionaje en la cárcel de Ezeiza sobre distintos dirigentes, que también buscaban afectar a referentes políticos de la oposición de entonces, le pidió ayer al juez federal de La Plata, Ernesto Kreplak, que le envíe la causa de la “Gestapo” (la reunión de la mesa antisindical de Villegas en la sede del Banco Provincia en 2017). El argumento es que algunos de los involucrados en esa causa tendrían relación con las personas que están siendo imputadas en la causa del espionaje ilegal de la cárcel de Ezeiza, y que ambas causas estarían relacionadas porque hay en las dos espionaje ilegal.
“Es una resolución que a nosotros nos preocupa muchísimo porque estamos advirtiendo que los imputados en la causa de la Gestapo pareciera que quieren manipular la Justicia y pareciera que lo están logrando; no para preservar sus garantías legales, sino para tratar de buscar la impunidad frente a la gran cantidad de pruebas que existen”, le dijo a diario Hoy César Albarracín, el abogado de Juan Pablo “Pata” Medina, el blanco principal de la causa “Gestapo” y el gremialista al que buscaban encarcelar.
Ahora el pedido le llegará al juez Kreplak y tendrá que decidir si acepta o no lo solicitado por Martínez de Giorgi.
Aún no se cuenta con una opinión específica del magistrado platense sobre esto, porque todavía no le ha llegado el planteo del juez de Comodoro Py. Sin embargo, según fuentes judiciales, uno puede “intuir”, por las distintas resoluciones que fue dictando Kreplak en esta causa, que habría una respuesta negativa al pedido porque ya ha definido, en el objeto procesal de esta causa, que es autónomo con respecto a lo que se investiga en la causa del espionaje ilegal en la cárcel de Ezeiza, que tiene a cargo Martínez de Giorgi y que involucra a una cantidad de funcionarios provinciales y de actores locales de la ciudad de La Plata.
“Si Kreplak mantiene el criterio que sostuvo hasta este momento, que la causa de la Gestapo se tiene que tramitar en los juzgados federales de La Plata, se tratará el pedido y ahí se trabará una cuestión de competencia”, explicó Albarracín.
Cómo puede resolverse
Frente a este tipo de casos, lo que prevé el Código Penal es que la Cámara Federal del juez que previno defina la cuestión.
Si estamos hablando de la causa de la “Gestapo”, el juez que previno es Ernesto Kreplak; de manera
que quien debería resolver el conflicto que se plantea entre Martínez de Giorgi y Kreplak es la Cámara Federal de La Plata. Esta tendrá que decidir dónde se tramita la causa.
Primero, Kreplak decidirá si acepta o no el pedido del juez de Comodoro Py. Si decide mantenerla en La Plata, como hay opiniones distintas de los dos jueces, la que tendrá que definir quién tiene razón será la Cámara Federal de La Plata.
Dado que en este caso hay un conflicto entre dos jueces, uno de La Plata y otro de la Capital Federal, se plantea qué cámara tiene que resolver el conflicto entre esos dos. Y la Cámara Federal de La Plata será la que defina. Esto no quiere decir que, como la Cámara Federal que previno en el caso de la Gestapo fue la de La Plata de Kreplak, esta será elegida para que la causa quede allí, sino que la Cámara platense hará un análisis que tiene otros componentes: básicamente tendrá en cuenta si hay identidad de imputados, de objetos y de pruebas.
“Cuando tenés causas que son claramente conexas (es decir, ambas tienen las mismas pruebas y los mismos imputados), es muy probable que se tengan que acumular. Acá hay claramente una diferencia muy específica en cuanto a los objetos. No hay coincidencia de imputados, por lo menos no plenamente, y las pruebas que hacen a la causa de la Gestapo no son comunes en su mayoría con las que tiene Martínez de Giorgi; con lo cual no hay razón para esta acumulación que, para mí, responde a una maniobra como la que están acostumbrados a hacer los servicios de inteligencia, que es manipular la jurisdicción para buscar un juez que les resulte más favorable a sus intereses”, concluyó César Albarracín en diálogo con diario Hoy.