La inversión en infraestructura cayó a mínimos históricos

El ajuste fiscal impulsado por el Gobierno nacional ya muestra consecuencias concretas en la vida cotidiana de los argentinos. Según datos del Ministerio de Economía bonaerense, la inversión de capital del Sector Público Nacional cayó al 1,9% del gasto total durante el primer cuatrimestre de 2024-2025, el valor más bajo en al menos una década.

“La inversión nacional de capital, indispensable para cuidar y mejorar la infraestructura del país, está por el piso”, afirman desde el Ministerio. En comparación, entre 2016 y 2019 el promedio fue de 5,4%, y entre 2020 y 2023 alcanzó el 6,6%. Hoy, esa cifra se desplomó a menos de un tercio.

Las consecuencias son visibles: obras paralizadas, rutas en mal estado, universidades deterioradas y proyectos estratégicos que quedaron en pausa. Desde la cartera de economía alertaron que “las consecuencias inevitables del retiro del Estado nacional son peores rutas, universidades deterioradas y obras paralizadas en todas las provincias”.

La decisión del Gobierno nacional de reducir drásticamente la inversión pública impacta de manera directa en las provincias y en el desarrollo del país. Sin intervención estatal, las brechas territoriales se profundizan, el empleo cae y el tejido productivo se debilita. El retroceso en infraestructura compromete no solo el presente, sino también el futuro del país.