Lago Escondido: el escándalo continúa

Ante el escándalo de los chats filtrados que pertenecen a jueces federales, funcionarios porteños y empresarios del Grupo Clarín, El Destape continuó publicando una serie de audios y conversaciones. Uno de ellos correspondía a Pablo Casey, abogado del Grupo Clarín, quien, intentando calmar a sus colegas luego de la exposición de los primeros chats, y desviando el foco de la gravedad del asunto (la “violación de deberes de funcionario público, admisión de dádivas y tráfico de influencias”), aseveró: “Nosotros queremos saber quién fue el tipo que sacó la foto de la planilla”

Asimismo, expusieron al fiscal general de CABA, Juan Mahiques, quien dijo que la fiscal federal de Bariloche “ofreció mandar la causa a Py o, en su defecto, pedir que nosotros aportemos o ella pida a la empresa las facturas del vuelo y eventualmente del hospedaje con los denunciados”, haciendo referencia a las alternativas “judiciales” que beneficiarían, una vez más, a los personajes del poder macrista.

Por su parte, el periodista Juan Alonso publicó en Twitter más conversaciones en las que los jueces involucrados en el hecho se “dan clases” de derecho, ante la necesidad de tapar el problema en el que se verán envueltos en las próximas horas. “El juez federal Yadarola expone su clase argumental de Derecho Penal para controlar los daños sobre el viaje a Lago Escondido que les pagó el Grupo Clarín. Luego el extraordinario juez federal

Ercolini da su opinión iluminada por el incendio. Antes Mahiques (p), rey del grupete”, expresó Alonso, al publicar uno de los chats en los que Pablo Yadarola explica los movimientos que fiscales y jueces podrían llevar adelante para culpabilizar a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), por “brindar información” privada.

A su vez, compartió varios audios de Julián Ercolini con los directivos de Clarín y Yadarola, en los que continúan planteando “alternativas” para zafar de la exposición y futuras denuncias penales. Al respecto, Alonso se preguntó lo que nos preguntamos todos los ciudadanos: “¿No hay un juez independiente en la sala que pueda resolver estos delitos de dádivas y malversación de documentos por parte de jueces y funcionarios?”.

Lo cierto es que se espera más información, pero principalmente los ojos estarán puestos en el accionar de la Justicia, ante tal escándalo que incumple una vez más con las leyes, la democracia, y genera el descreimiento de un Poder Judicial por y para el pueblo, en vista de que ya ni siquiera se esconden para “hacer de las suyas”, ni les importa que la verdad salga a la luz, porque “saben cómo manejar la situación”.