Municipios bonaerenses ya conocen los nuevos valores que rigen el CUD
Se trata del Código Único de Distribución, que es el dinero con el que los distintos intendentes contarán este año.
Como sucede todos los años, el gobierno de la provincia de Buenos Aires estableció en los últimos días los nuevos valores que regirán el Código Único de Distribución (CUD), es decir, los que establecen el parámetro a partir del cual se distribuirá el dinero coparticipable a los municipios bonaerenses.
Pero antes de avanzar, cabe mencionar que el CUD está conformado por tres ítems que pueden variar año tras año: en principio, hay que destacar que el 58% corresponde al Régimen General, que tiene en cuenta aspectos como población, superficie y capacidad tributaria; el 37% corresponde al Régimen de Salud, distribuido entre los municipios que tengan establecimientos oficiales para la atención de la salud, mientras que el 5% restante corresponde al Régimen de Acción Social, que son básicamente los servicios sociales transferidos.
La masa coparticipable (100%) se divide entre los 135 municipios de la Provincia, por lo que lo que se le da a uno, se le quita a otro. En ese sentido, de acuerdo al CUD, el municipio más perjudicado en el reparto de este año será Avellaneda, con una caída de 0,84 puntos en relación al año pasado, lo que significa un 66% menos de recursos.
Por otra parte, a este municipio le sigue Bahía Blanca, cuyo índice retrocedió 0,83 puntos y para este año contará con un 64% menos de dinero coparticipable.
Caso contrario es el que se puede ver en Arrecifes, que es el municipio que recibirá más dinero que el año pasado en términos porcentuales, cuyo diferencial es de 0,97 puntos, lo que significa un 351% más que el período anterior, seguido por Azul, cuya mejora en sus valores será de 0,60 puntos, un 84% más que en 2023.
Vale mencionar que, más allá de estos números, el ojo de la política en general estará puesta en cómo el gobierno de Kicillof hace para administrar los fondos de la Provincia en un contexto adverso marcado por la condición de tener un Gobierno nacional de otro color político. El desafío ya comenzó, y la expectativa crece a medida que avanzan los meses y se repite el discurso de “no hay plata”.