Una Corte Suprema polémica y un panorama económico incierto: Cristina Kirchner apunta contra Macri y los medios

La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner lanzó duras críticas contra la Corte Suprema, Mauricio Macri y los grandes medios de comunicación en una serie de publicaciones en sus redes sociales.

Señaló el fallo de la Corte en la causa del Correo Argentino como “inédito, escandaloso e inconstitucional” y cuestionó la connivencia entre el poder judicial, empresarial y mediático en detrimento del orden constitucional y el interés público.

“¿Escenas de un país fallido?”

En sus mensajes, Fernández de Kirchner destacó que el fallo de la Corte favorece al expresidente Macri y su familia, evita que paguen “cifras multimillonarias” al Estado en el marco de la causa del Correo. Según explicó, este fallo transforma de manera irregular al Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) en instancia revisora de sentencias de tribunales nacionales, algo que calificó como “un verdadero disparate y una violación flagrante al ordenamiento constitucional, federal y de división de poderes”.

La vicepresidenta enfatizó que este fallo, además de beneficiar al expresidente, refuerza una justicia que actúa como “custodia de los poderosos” Para ejemplificar dicha situación dijo: “Es como si la Corte fallara que las sentencias de los tribunales nacionales las resuelva el Tribunal Superior de Justicia de la provincia de Santa Cruz”.

Cristina Kirchner también criticó la cobertura mediática de este tema. Mencionó que diarios como Clarín y La Nación evitaron referirse al fallo en sus tapas y eligieron, en cambio, destacar la “salida triunfal” del juez Juan Carlos Maqueda al cumplir 75 años. Según la exmandataria, esto refleja una estrategia de los grandes medios para proteger a la Corte y sus decisiones, mientras se dilapidan recursos y se ejerce presión sobre los empleados del poder judicial.

En paralelo, CFK señaló los problemas económicos del país, enfocándose en el default de tres grandes empresas agropecuarias, como Surcos, Los Grobo Agropecuaria y Agrofina. Afirmó que estas situaciones no son novedosas, pero sí paradójicas: “Empresas que se llenaron de plata con gobiernos que detestan terminan arruinadas con los gobiernos que votan”.

También cuestionó el modelo económico actual, al que definió como “reprimarizado y con claro sesgo extractivista”, con niveles de endeudamiento insostenibles y una economía dependiente de la volatilidad de los precios de commodities como el gas y el petróleo.

La vicepresidenta concluyó su crítica con un análisis político profundo, advirtiendo que las decisiones judiciales, económicas y políticas actuales acercan a Argentina a la categoría de “país fallido”. Según Fernández de Kirchner, la Corte Suprema actúa como un actor central en este proceso, al proteger los intereses de los poderosos mientras disciplina a quienes intenten desafiar esos privilegios.

En un escenario donde la Corte Suprema, los medios y el poder económico parecen alineados, la expresidenta busca instalar un debate sobre la dirección institucional y económica del país.