Vidal y el narcotráfico

Un viejo y sabio refrán que reza: “No hay peor ciego, que aquel que no quiere ver”. El dicho calza a la perfección para describir la actitud de la gobernadora María Eugenia Vidal, que ayer habló de un supuesto compromiso que ella asumió con madres de adictos para luchar contra el narcotráfico y mencionó, como si fuese un hecho del pasado, la “connivencia” de sectores de la policía con los mercaderes de la muerte. “Voy a ser parte de los que persiguen a las bandas que venden drogas”, dijo la mandataria provincial anoche en una entrevista realizada en un canal de noticias.

Al escuchar a la gobernadora, no fueron pocos los que pensaron en lo que ocurre actualmente en el Ministerio de Seguridad, donde hace tan solo dos semanas –con la venia de Vidal- el titular de la cartera, Cristian Ritondo,  confirmó a varios integrantes de la cúpula de la Policía Bonaerense que, precisamente, arrastran pesados prontuarios penales por presuntos vínculos narcos.

Concretamente, tal como lo viene informando Hoy,  el Jefe de la Policía, Pablo Bressi, y el Director de Drogas Ilícitas, Claudio Fuentes, son investigados por la Justicia Federal. Ambos están acusados por cobrar dinero de narcotraficantes a cambio de liberar zonas para que vendan estupefacientes. Además, al menos otros seis funcionarios policiales designados en puestos claves en la lucha contra la criminalidad están en esa misma situación.  En una de las causas, que tramita en los tribunales federales de San Martín, se investiga una denuncia en contra de Bressi en la que se lo acusa de que todos los lunes recibía en su despacho sobres con dinero “sucio” proveniente de las 18 delegaciones de Drogas Ilícitas.

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