Amenaza de bomba en un vuelo que se dirigía a Ushuaia
El avión tuvo que aterrizar en Comodoro Rivadavia para realizar las tareas de control.
A las 4:46 de esta mañana el vuelo AR1882 de Aerolíneas Argentinas despegó de Aeroparque con destino a Ushuaia. Un llamado anónimo al 911 alertó sobre la presencia de una bomba entre el equipaje del avión. A las 7:40 los pilotos debieron aterrizar en Comodoro Rivadavia por la emergencia del posible explosivo dentro de su aeronave.
Una situación de máxima tensión se vivió hoy por la mañana debido a una posible bomba en un vuelo que se dirigía a Ushuaia. En medio del viaje, los pilotos realizaron un aterrizaje de emergencia a pedido de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). Un llamado anónimo dio la alarma de una bomba entre el equipaje.
La llamada al 911 fue desde la Ciudad de Buenos Aires, cuando el avión ya se encontraba volando. El llamado de atención por parte de las autoridades llegó a la aeronave cuando ésta se encontraba sobrevolando el Golfo de San Jorge. El aeropuerto más cercano era el de Comodoro Rivadavia, en Chubut.
Así, los pilotos desviaron el vuelo que llevaba a 172 pasajeros y seis tripulantes. Todos los vuelos que debían aterrizar en Comodoro también se vieron desviados pero con destino a Trelew.
Para controlar la situación, la Unidad de Operaciones de la PSA de Comodoro Rivadavia conformó un Comité Operativo de Emergencias, con todos los organismos aeroportuarios, para recibir al avión y asegurar la integridad del aeropuerto y los pasajeros. Se dirigió a la aeronave a un sector remoto del aeropuerto, donde se encontraba el Servicio de Salvamento y Extinción de Incendios de la Administración Nacional de Aviación Civil, oficiales de la PSA y personal de la brigada de explosivos de la Policía de Chubut.
Mientras el personal de la brigada revisaba el avión y el equipaje que traían, los pasajeros fueron escoltados hasta el hall de arribos del aeropuerto. Hasta ahora no hay señales de ninguna bomba.
La operación fue realizada bajo constante comunicación con el juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°2 a cargo del juez Sebastián Ramos, quien interviene en la causa.