Berisso: una marcha por un abuso terminó con dos policías agredidos
Familiares de los tres menores que fueron víctimas convocaron a una manifestación, y tras la intervención de los oficiales se secuestraron varias armas.
Durante el mediodía de ayer, familiares y allegados de las tres víctimas menores de edad, que presuntamente fueron abusados sexualmente por un adolescente de 14 años, convocaron a una movilización en la vecina localidad de Berisso. La misma terminó con al menos dos de los efectivos policiales que participaron del operativo con algunas heridas producto de un ataque.
De acuerdo a la información a la que accedió diario Hoy, la cita a ser parte de la marcha se realizó mediante las redes sociales, donde instaban a participar de la protesta en las calles 95 y 130 durante el mediodía de ayer. El objetivo era reclamar por justicia ante la falta de respuestas por parte del Poder Judicial y por ello, se montó en las inmediaciones un procedimiento para resguardar a quienes participaran, pero derivó en un encontronazo.
Sin embargo, lo que comenzó con una marcha para exigir que avance la causa contra el acusado y pedir respuestas de los fiscales terminó desmadrándose con el correr de los minutos. Al momento de hacerse presente el personal policial luego de anoticiarse de la concentración que se estaba llevando a cabo en la vía pública, algunos de los presentes comenzaron a arrojar objetos contundentes.
Debido a la cantidad de proyectiles que volaron por los aires, algunos impactaron de lleno contra los agentes de seguridad que intervinieron en el hecho, provocándole distintas lesiones al menos a dos de los numerarios. Por tal motivo, avanzaron sobre los manifestantes intentando evitar la agresión y, además, les encontraron armas de fuego en su poder, que luego fueron secuestradas.
Cuchillos, cartuchos y demás objetos
En el marco de la protesta, los efectivos de la comisaría Tercera detuvieron a siete personas en total, seis hombres y una mujer, que habrían encabezado los disturbios. Al momento de requisarlos, les incautaron a los sospechosos un revólver calibre 22 con 7 municiones, un machete, dos armas de fuego de puño tipo caseta y dos cartuchos escopeta calibre 12 de guerra.
Con todos esos elementos, los alborotadores fueron arrestados y trasladados luego hasta la seccional, donde quedaron imputados por “tenencia y portación ilegal de arma de uso civil, resistencia y atentado a la autoridad y lesiones”. En cuanto a los dos oficiales, fueron atendidos por personal médico y resultaron con heridas leves que no requirieron la derivación a un hospital.