“Chacal de Cañuelas”: los fundamentos de la fiscal para pedir una condena ejemplar

Como informó este multimedio, ante el Tribunal Oral en lo Criminal n°4 de La Plata la fiscal Helena de Cruz Orsi pidió 50 años de prisión para Miguel Ubaldo Reynoso (55), acusado de abusar sexualmente y dejar embarazada tres veces a su hijastra, de 30 años.

Reynoso fue acusado formalmente de tres hechos con acceso carnal, el primero de ellos agravado por la convivencia con un menor de 18 años. La defensa del imputado planteó la prescripción del primer abuso a M. (llamada así para preservar su identidad).

En cambio, y en línea con los planteos que viene realizando en las distintas causas por violación, la fiscal sostuvo que “la prescripción no puede correr antes de que las víctimas menores de abuso sexual tengan 18 años porque resulta inconstitucional e inconvencional, por lo que dicen los tratados internacionales de Protección del Niño, de la Mujer y el Pacto de San José Costa Rica”.

En este sentido, De la Cruz Orsi solicitó que “se aplique retroactivamente la Ley Piazza o la de respeto de los tiempos de la víctima, sino que se declarara la inconstitucionalidad e inconvencionalidad de los artículos 63 y 67 del CP Ley 25.990 por no contemplar la especial vulnerabilidad de los niños y las posibilidades reales de poder denunciar y se declare la plena vigencia de la acción”.

Los hechos

Para la fiscal, “se encuentra acreditado que, durante febrero de 2005, en un domicilio de la calle Santiago del Estero de Ezeiza, un sujeto, aprovechando la relación preexistente y convivencia, y la imposibilidad de la víctima de consentir su acción, abusó de una nena que entonces tenía 13 años”.

Respecto a la segunda violación, el Ministerio Público argumentó que ocurrió en diciembre de 2010 en una vivienda de Cañuelas. Allí, Reynoso, “bajo amenazas y aprovechando la imposibilidad de la víctima de consentir libremente, violó a la joven de 18 años”. En 2016, el acusado volvió a abusar sexualmente de la mujer dejándola, otra vez, embarazada.

Producto de las vejaciones, la víctima tuvo tres hijos: uno de 16, otro de 11 y el tercero de seis años.

B. Reynoso, medio hermano de la mujer abusada, contó durante el juicio del retraso mental de la joven. El hombre narró que siembre encontraba encerrados a su media hermana y los hijos de esta, que tenían miedo y que el padre les ordenaba que no salieran de la vivienda familiar.

El 20 de abril próximo se conocerá el veredicto de los jueces Carolina Crispiani, Emir Caputo Tártara y Juan Carlos Estrada.