Conmoción: unos ladrones gatillaron a una mujer y a su perro

La zona norte de la región está pasando por su peor momento en materia de seguridad, ya que los robos callejeros o entraderas ocurren a diario, sumado al reciente ataque a varios jubilados en localidades como Tolosa, Gonnet y Villa Elisa.

Sin embargo, en la jornada de ayer la víctima fue una docente domiciliada en City Bell, quien recibió la desagradable visita de cinco delincuentes armados, que la hicieron vivir un verdadero calvario y momentos de terror.

Según indicaron voceros consultados por diario Hoy, el hecho tuvo lugar en la zona de 21 y 453, donde la damnificada de 61 años descansaba tranquilamente. La mujer se encontraba sola en su domicilio, cuando escuchó ladrar al perro e inmediatamente sintió ruidos en la puerta de atrás de la finca.

En ese instante, y antes de que pudiera reaccionar, fue sorprendida por un grupo de individuos que iban con la cara cubierta y pistolas en sus manos, quienes le exigieron dinero. Cabe mencionar que en ese instante uno de los hampones le gatilló al can de la docente y luego a ella, aunque afortunadamente el disparo no salió.

Con el susto del primer momento llegó lo peor: uno de los malhechores se quedó con ella vigilándola, mientras que los otros cuatro comenzaron a recorrer la vivienda, generando un gran revuelo tras su paso y apoderándose de cuanto encontraban.

Los ladrones no dejaron un rincón sin revisar y todas las habitaciones quedaron completamente destruidas, con cajones abiertos y muebles tirados por el piso. Al cabo de varios minutos de pesadilla, finalmente los individuos se hicieron con un televisor de 45 pulgadas, una notebook, joyas y quince mil pesos en efectivo.

Ya con el botín en su poder, emprendieron la fuga con rumbo desconocido. Se sospecha que podrían haber escapado a bordo de un vehículo en el que cargaron todo lo robado, aunque para determinarlo fehacientemente será necesario analizar las cámaras de seguridad de las inmediaciones.

Vale aclarar que al cierre de esta edición los implicados permanecían prófugos de la Justicia y no había rastros sobre su paradero o identidad. Debido a esto, personal policial trabajó en la escena para recolectar pruebas o testimonios que sirvan para esclarecer el caso.

Por su parte, en lo que respecta a la víctima, la misma no habría sufrido lesiones de consideración; tomó intervención la comisaría Décima, con jurisdicción en la zona, y la Unidad Funcional de Instrucción número 9, de autores ignorados, caratulándose el hecho como “robo agravado”.