Dos personas asesinadas tras una sanguinaria pelea en San Carlos
Las causas de la gresca son motivo de investigación, aunque analizan la creciente disputa entre ciudadanos de nacionalidad argentina y paraguaya. Hubo disparos y armas blancas
Nuevamente, la violencia extrema se apoderó del barrio Las Palmeras de San Carlos. Durante un bestial enfrentamiento ocurrido anoche, dos personas resultaron asesinadas en una gresca que no discriminó armas, ya que se emplearon tanto de fuego como blancas.
Como si fuese poco, los vecinos no dejaron trabajar a la Policía con normalidad porque los recibieron a pedradas, y debió pedirse la colaboración del Grupo de Apoyo Departamental (GAD).
Voceros oficiales le contaron a Trama Urbana que todo tuvo lugar cerca de las 21, en 36 entre 151 y 151 bis, y desde luego, las versiones de lo sucedido difieren de un lado y otro.
Es conocida ya la rivalidad entre sujetos de nacionalidad argentina y paraguaya, que viven enfrentándose. Esa es una de las teorías que al cierre de esta edición manejaban los investigadores. Aunque no se descartan otras, aportadas principalmente por los familiares de los fallecidos.
Lo cierto es que Nahuel González, de 18 años, recibió un disparo en la cabeza que lo dejó sin vida. Si bien sus allegados lo trasladaron de urgencia en un auto particular hasta el hospital Alejandro Korn de Melchor Romero, llegó muerto y nada pudo hacerse por él.
De acuerdo con la novia del occiso, ambos estaban juntos dentro de una vivienda de la cuadra, cuando escucharon gritos que provenían de la calle y, al salir, el joven cayó desplomado por un balazo en el cráneo.
Más incidentes
Claro que la gresca continuó y poco les importó a los involucrados el crimen de González. Siguieron adelante, para dirimir sus diferencias de manera salvaje y en ese marco se produjo el segundo homicidio, aunque hasta el cierre de esta edición no había demasiados datos del hecho. La Policía trata de esclarecer si se trató de una venganza por la muerte de González.
Al parecer, el damnificado, identificado como Aldo Rivas (19), fue derivado en un vehículo particular hasta la Unidad de Pronta Atención de Los Hornos ya sin signos vitales, donde detectaron que presentaba dos lesiones: una de arma blanca y la otra de fuego (un disparo en el pecho).
Dos mujeres fueron demoradas por impedir el accionar policial, cuando quisieron ocultar una de las pistolas utilizadas en la matanza. Pero la situación fue tornándose cada vez más violenta, porque comenzaron a agredir a los uniformados. De hecho, cerca de las 23 “se volvieron a solicitar refuerzos en la zona, ya que continuaba el conflicto”, contó un pesquisa.