El crimen del pelotero, a juicio

El fiscal de la causa pidió la elevación. Acusa al exmarido de haber enterrado viva a una mujer de 25 años en la casa que compartían en Villa Elisa

El fiscal Marcelo Romero pidió elevar a juicio el femicidio contra Sonia Morel, ocurrido en agosto de 2015 en Villa Elisa, cuyo cuerpo fue encontrado a unos 30 centímetros de profundidad en el patio del terreno. Por este aberrante hecho está preso su exmarido, Oscar Raúl Daniel Abramo (39).

De acuerdo a los datos del doctor, el acusado “abusando de su condición de hombre y en desmedro al género opuesto, le quitó la vida a su concubina en el domicilio que compartían en 18 entre 424 y 425. La golpeó brutalmente en el rostro, tras lo cual, aún encontrándose con vida y con la finalidad de ocultar la evidencia, enterró el cuerpo de la misma en el patio del mismo predio, causándole la muerte por asfixia por sofocación”. 

Entre los testigos se encuentran el primo de Abramo, Fernando Herenu, quien relató episodios de violencia padecidos con anterioridad por la damnificada y describió al imputado como “una persona violenta y maltratadora”.

Otro frentista relató que, en una oportunidad, el hombre golpeó salvajamente en todo el cuerpo a su pareja embarazada con un cinto y sin ningún tipo de reparo por la presencia de terceros. Refirió que Abramo era celoso, y la acusaba con frecuencia a ella de prostituta.

Narcisista

El hecho se conoció en octubre del año pasado, cuando la Policía descubrió el cadáver de Morel enterrado a 30 centímetros de profundidad en el patio trasero de la vivienda de Villa Elisa, debajo de un pelotero construido por el asesino, en donde jugaban los cuatro hijos de la damnificada. 

Según el informe psicológico realizado al imputado, el mismo “posee un estilo vincular controlador, dominante, racional, que impone su punto de vista de modo egocéntrico. Su material psicotécnico da cuenta del hallazgo de indicadores de impulsividad y agresividad y baja tolerancia a la frustración; cuestiones que contribuyen, junto con su elevado narcisismo, a que, bajo condiciones particulares de alta tensión emocional y malestar subjetivo, prevalezca la vivencia de agravio o herida narcisista”.