En medio del conflicto, atacaron salvajemente a los policías: ocho demorados
Un joven de 19 años y con antecedentes penales murió de un certero balazo en la cabeza que le “destruyó la masa encefálica”.
De acuerdo a la operación de autopsia a la que fue sometido el cuerpo de Nahuel González, el joven de 19 años y con antecedentes penales murió de un certero balazo en la cabeza que le “destruyó la masa encefálica” y los forenses pudieron recuperar de su cráneo el proyectil que lo ultimó, tratándose de uno calibre .22. Por su parte, la causa del deceso de Rivas fue por un “shock hipovolémico de tórax”. En tanto, los peritos de la Policía Científica que trabajaron en la escena del crimen incautaron varias vainas servidas, nueve milímetros, y que ya forman parte de la investigación judicial.
La misma avanza para poder darle un cierre a los homicidios, pero hasta el momento no hubo demasiadas novedades. El asesinato de González parecería ya estar resuelto, dado que el autor del hecho, Marcelo Rivas, también fue ultimado en el mismo momento.
Faltaría, entonces, resolver el fallecimiento de este último, y no será para nada sencillo puesto que quienes cobraron venganza por mano propia fueron los allegados de González. Determinar quién apretó el gatillo para quitarle la vida, cuando actuaron varias personas, será una ardua tarea para los detectives del Gabinete de Homicidios de la DDI.
En tanto, por los delitos de “atentado, resistencia a la autoridad, daños e infracción al artículo 205 del Código Penal”, se demoró la misma noche del domingo, cuando todo sucedió, a una mujer y siete hombres. Tres de ellos son familiares entre sí. La aprehensión tuvo lugar en 36 y 151. A todos se los acusa de haber atacado a pedradas a los móviles policiales que fueron a cubrir la denuncia, dañando inclusive un patrullero, al que le hicieron estallar la luneta.
“La situación fue caótica y los vecinos no dejaban acercarse a los agentes de la fuerza que se dirigieron al tomar conocimiento de un posible ataque a balazos, con personas heridas. Ya de por sí la zona es hostil para la Policía, pero ayer fue todavía peor. Hubo golpes, insultos y agresiones con objetos contundentes”, explicó una fuente. Finalmente esos revoltosos fueron capturados y trasladados a la subcomisaría La Unión, y ahora deberán rendir cuentas ante la Fiscalía Penal en turno N° 17.