Encañonaron a un repartidor y le robaron todo a metros del Parque Castelli

Los especialistas aseguran que hay una banda delictiva dedicada a asaltar a los trabajadores de delivery. No hay detenidos. En tanto, también dispararon contra un motociclista platense.

Una banda de delincuentes tiene a maltraer a los repartidores platenses, ya que no se cansan de asaltarlos y sacarles no solo el dinero que llevan, sino también la moto en la que circulan y que representa su medio de trabajo. En las últimas horas hubo que lamentar un nuevo caso en las inmediaciones del Parque Castelli y, aunque el mismo quedó registrado en una cámara de seguridad, los implicados permanecen prófugos.

El nuevo atraco se materializó en 63 y 26, cuando cuatro hampones a bordo de dos motos vieron a un delivery que estaba por entregar un pedido, a las 19.

Se le abalanzaron y le sacaron sus pertenencias, como la billetera y el celular, además del pedido y hasta la mochila en donde lo llevaba. No conformes, se apropiaron también del rodado, con el que huyeron.

Lejos de tratarse de un caso aislado, los repartidores aseguraron que son blanco fácil de la delincuencia y, pese a la cantidad de reclamos, marchas y pedido de seguridad, nada cambió. “Hay una banda que los ataca, y sabemos cómo operan”, admitió un vocero, aunque pese a eso no lograron localizarlos.

Indignante robo

En tanto, el lunes, entre las 19 y las 21, sujetos desconocidos le robaron el auto Duna ­Weekend a una familia que lo usa para trasladar a un paciente diabético al hospital. El suceso se registró en una vivienda de 41 entre 13 y 14; tampoco en esta oportunidad pudieron dar con los causantes.

A su vez, un motociclista platense sufrió un asalto en el cruce de las rutas 6 y 3, en Cañuelas. El incidente tuvo lugar el sábado, cuando la víctima fue abordada por tres cacos.

“Venía por la Ruta 6, de Luján a La Plata, y 1.500 metros antes de la rotonda me encañonaron con pistolas calibre 9 milímetros”, explicó, y narró que los delincuentes iban en dos motos BMW.

Para obligarlo a detener la marcha, dispararon una vez al suelo y, sin más remedio, les dio su ciclomotor (una Honda CBR 919) y su celular.

Noticias Relacionadas