Encontraron a una joven asesinada dentro de un barril de 200 litros

La víctima fue identificada como Naiara Durán, y la mataron a puñaladas. Estaba desaparecida desde hacía casi una semana. Fueron detenidos su pareja y su prima.

Una joven de 25 años que estaba desparecida desde hacía cinco días fue encontrada asesinada a puñaladas dentro de un tacho de 200 litros a orillas del río Paraná, en la ciudad bonaerense de San Pedro, y como sospechosos del crimen fueron detenidos su expareja y una prima de la víctima, según informaron este viernes fuentes policiales y judiciales.

El hallazgo se produjo este jueves por la tarde, cuando efectivos de la Prefectura Naval Argentina (PNA) encontraron el cadáver de la joven envuelto en una lona dentro de un tacho de 200 litros, con signos de haber recibido varias puñaladas.

La víctima fue identificada como Naiara Durán (25), quien se encontraba desaparecida desde el domingo último y por quien su abuela había realizado el miércoles una denuncia de averiguación de paradero ante la Policía de San Pedro.

Los efectivos de esa ciudad, con colaboración del personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Nicolás, iniciaron la búsqueda de la joven, y en ese marco relevaron las cámaras de seguridad de distintos sectores de San Pedro.

Así es como se estableció que Naiara Durán había ingresado a una propiedad situada en Dávila 345, que tiene dos viviendas, una que da al frente, donde reside su exnovio, Mario Damián Gil (31), y otra que está en el fondo, habitada por la prima de la víctima, de 26 años.

Por tal motivo, la fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción 7 de San Nicolás, María del Valle Viviani, solicitó un allanamiento en esos domicilios, de donde se secuestraron dos teléfonos celulares, entre ellos el de Naiara Durán, aunque no se hallaron rastros de la joven.

Este jueves por la tarde, los pesquisas fueron alertados por personal de la PNA del hallazgo de un cuerpo.

Al arribar al lugar la fiscal con la Policía Científica y el médico de la fuerza de seguridad, se estableció que el cuerpo pertenecía a una mujer que presentaba características fisonómicas y vestimentas similares a la joven buscada.

Tras ello, la fiscal Viviani solicitó la aprehensión de la expareja de la joven asesinada, Mario Gil, y más tarde la de su prima.

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