Los vecinos hicieron lo que la policía no: detener a delincuentes

Los frentistas de San Carlos atraparon a dos hombres que estaban cometiendo robos en casas. Ambos tienen antecedentes.

"Vamos a pedirle un sueldo, una compensación económica al Ministerio de Seguridad, o a quien sea, porque hacemos el trabajo de la Policía cuando no nos corresponde. De hecho, trabajamos hasta más que ellos, que hace tiempo hacen la vista gorda y están del lado de los delincuentes”, dijo, con ironía, un vecino del barrio platense de San Carlos.

Es que allí, en las últimas horas, un grupo de frentistas hizo lo que los agentes de la fuerza no hace y capturaron a dos ladrones, con múltiples antecedentes penales y que tiene a mal traer a la zona.

De acuerdo a los voceros consultados por Trama Urbana, todo ocurrió durante la madrugada de este domingo, cuando dos cacos salieron a hacer de las suyas, con total impunidad, ya que “la policía libera la zona”, según los lugareños.

Estos narraron que los implicados ya son conocidos en el barrio, y que suelen ingresar a diferentes viviendas en horarios nocturnos para apoderarse de diferentes elementos que consideran de valor y también de dinero en efectivo.

Sin embargo, en esta oportunidad no se salieron con la suya y fueron los dos capturados por los vecinos, en la calle 155 y 530 bis, dentro del barrio Procrear de San Carlos. “Estos tipos venían cometiendo una seguidilla de robos, así no podíamos seguir”, señaló un frentista.

Una vez atrapados, ambos fueron trasladados antes de ser linchados hasta la subcomisaría La Unión, con jurisdicción en la zona, donde quedaron alojados a la espera de la declaración ante la fiscalía penal en turno.

En tanto, los vecinos aprovecharon para elevar sus quejas por el mal desempeño policial y pidieron más presencia de oficiales en el barrio.

Otro atraco

En tanto, una joven de 29 años que se dirigía a su trabajo fue asaltado por un motochorro en diagonal 80 y 47, a pocos metros del microcentro platense. La víctima acababa de bajar del micro en 7 y 47 e iba caminando rumbo a su empleo cuando fue abordada por el hampón, que le quitó su teléfono celular.

La damnificada llegó a su trabajo y de allí fue hacia la comisaría Primera para radicar la correspondiente denuncia. Sin embargo, hasta el cierre de la presente edición, los numerarios no habían podido ni siquiera identificar al responsable, que sigue prófugo.

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