Sangriento crimen: matan a puñaladas a un joven en Los Hornos

Sangriento, brutal y rápido: así puede definirse el crimen que tuvo lugar en las últimas horas en La Plata. Fuentes policiales indicaron que todo se desarrolló minutos después de las 20 del sábado en calles 141 y 80 bis, donde se encontraba Lucas Paiva, un joven de 25 años domiciliado a escasos metros de allí, junto a tres amigos. Entonces apareció un individuo algunos años menor y lo increpó.

Ya son 55 los homicidios a lo largo del año en la región, una cifra escandalosamente superior a la de 2019, cuando se materializaron 30 asesinatos.

“Se trató de una disputa de vieja data por problemas personales y diferencias de las partes”, relató un investigador. En metido del conflicto, el agresor extrajo una cuchilla de carnicero y no dudó en asestarle varias puñaladas a la víctima en diferentes partes del cuerpo. Consumado el bestial acto, se dio a la fuga llevándose consigo el arma blanca.

El damnificado fue trasladado por sus allegados hasta el hospital San Juan de Dios, en estado crítico. Los médicos lo atendieron y trataron de estabilizarlo, pero los cortes eran de extrema gravedad y poco pudieron hacer por él. “Presentaba múltiples lesiones punzocortantes en el pecho, brazos y piernas, que hicieron imposible salvarle la vida”, contó un portavoz.

Arma tumbera

Agentes de la comisaría Tercera, con jurisdicción en la zona y liderados por su titular Juan Soler, tomaron conocimiento del ingreso de un hombre herido al nosocomio y comenzaron a investigar, solicitándose a su vez la colaboración del Gabinete de Homicidios de la DDI La Plata, dirigida por Christian Novelino.

Se entrevistaron con los amigos del fallecido y otros vecinos del área, quienes refirieron cómo fue el ataque y brindaron los datos correspondientes del implicado, quien vive a menos de 100 metros de donde se produjo el suceso. Cercado, este no pudo llegar muy lejos y fue arrestado cerca de las 22 en 141 y 80. Además, se le incautó un arma de fuego de fabricación casera, aunque no se halló hasta el momento la cuchilla implementada. A su vez, también se secuestraron para la investigación las prendas de vestir, manchadas de sangre, de Paiva.

Para evitar inconvenientes y “con el fin de resguardar su integridad física”, el presunto asesino no fue alojado en los calabozos de la seccional Tercera, sino que lo llevaron a la Octava y ahora deberá dar explicaciones ante la fiscalía penal en turno por el delito de “homicidio en riña”.