“Te llevas mi vida entera y dejás un vacío inmenso”: despidieron a Pía, la niña asesinada

Se trata de la pequeña que mataron de un disparo en el rostro en una casa de Ensenada. Los responsables enfrentan cargos por “homicidio doblemente calificado por su comisión con el concurso premeditado y criminis causa agravado por el uso de arma de fuego”.

La región continúa conmocionada por el brutal crimen de Pía, una nena de tan solo 2 años, que murió a causa de un disparo en el rostro durante un conflicto por la venta de una casa. El terrible episodio tuvo lugar durante la noche del martes en el barrio El Dique, de la ciudad de Ensenada y ahora su familia despidió la pequeña.

“Te llevas mi vida entera y dejas un vacío inmenso que jamás lo voy a superar”, comenzó diciendo Carolina, la abuela de la menor. “Te amo, pero no voy a parar hasta que hasta que paguen todos y esas dos mujeres asesinas no tienen perdón de Dios, te lo prometo hija de la abuela”, concluyó.

Por su parte, en lo que respecta a la investigación, los responsables enfrentan cargos por “homicidio doblemente calificado por su comisión con el concurso premeditado de dos o más personas y criminis causa agravado por el uso de arma de fuego”, cuya condena puede llegar hasta prisión perpetua.

El hecho

Tal como informó diario Hoy en su edición anterior, todo comenzó cuando una mujer llamada Carolina compró el lunes una casa ubicada en 50 y 123 del barrio El Dique por dos millones de pesos, de los cuales ya había abonado, según ella misma, $1.820.000.

Se dirigió el martes a las 19.30 a la vivienda para ocuparla y encontró las puertas barreteadas. “Tengo todos los papeles, la llave, la escritura”, contó Carolina, y agregó que al llegar “estaban dentro los que nos vendieron la casa (tres hombres y una mujer), que rompieron las cerraduras. Cuando entramos, estaban alcoholizados, tomando cerveza, y se generó una discusión”.

Dijo que uno de los presentes “hablaba por videollamada con un narcotraficante que está preso y me amenazaba con no devolverme la plata ni entregarme la casa, donde estaban hace dos años”. Finalmente “se fueron cuando llamé a la Policía, después de agredirme y darme una patada estando yo embarazada”, continuó.

Según el parte policial, una vez que los usurpadores se fueron, dos de ellos regresaron en una moto tipo enduro, roja y negra. Dispararon 13 veces contra la fachada y uno de los tiros impactó en el ojo derecho de Pía. Malherida, fue trasladada al hospital Cestino, donde murió en la guardia.

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