De La Plata a Israel...

Laura Sampedro, referente del fútbol femenino en la región y de último paso por Estudiantes, continuará su carrera en el Maccabi Hadera. A horas de haber llegado a su nuevo destino, la defensora charló en exclusiva con diario Hoy.

El fútbol femenino crece a pasos agigantados en todo el continente, y los equipos más grandes de la ciudad no son la excepción. Laura Sampedro, referente de la disciplina en la región y de último paso por Estudiantes, arregló su llegada al Maccabi Hadera de Israel. A horas de haber arribado a su nuevo destino, la experimentada defensora charló mano a mano con El Clásico.

“Fue un viaje largo, más de 20 horas con una escala en París. La cultura es totalmente diferente, estoy intentando socializar con el resto del equipo. Por suerte hay compañeras de toda América: México, Brasil y Estados Unidos. Por ahora me estoy manejando con el inglés; el hebreo es bastante complejo. Tenemos un preparador físico que es uruguayo, así que también me ayuda a interactuar”, comentó Sampedro.

Consultada sobre su presente futbolístico, la jugadora de 34 años explicó: “Yo venía de un parate de entrenamiento fuerte porque había rescindido con Estudiantes en junio. Tuve varias ofertas hasta que se dio lo de Israel. Llegué acá, tuve una práctica y al día siguiente disputé un encuentro completo. Fue un desgaste importante, pero lo sobrellevé bien”.

Cabe recordar que Sampedro tendrá su primera experiencia en el exterior, luego de una carrera ligada siempre a clubes de Argentina: un gran recorrido en AFA (incluyendo Boca e Independiente) y en el Pincha, con pasado en la Selección Argentina. En el combinado nacional –allá por el 2014– compartió vestuario con varias figuras, como Agustina Barroso, Florencia Bonsegundo y Aldana Cometti.

Por último, la exjugadora del León se refirió a las diferencias futbolísticas, y apuntó alto, pensando en los objetivos trazados: “Los entrenamientos están muy buenos, se trabaja a alta intensidad. Acá no hay tanto roce, hay más juego asociado y mucho pase corto. Poca pausa y mucha dinámica.

El objetivo es el campeonato. Son diez equipos en la liga y el campeón se clasifica a la Champions League. Sería un sueño colectivo y por supuesto individual. Voy a intentar aportar garra y entrega, además de sorprender con el juego aéreo, un poco lo que fueron las claves de mi última temporada”.

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