El amor inconmensurable para Gallardo y el aura de Scaloni le dieron color a la noche
El Clásico estuvo presente en la visita de Gimnasia al Monumental, habló con los hinchas de River y palpitó lo que para algunos es el momento de crisis del ciclo Gallardo.
Enviado especial
Una noche de fútbol “Monumental” se vivió con la visita de Gimnasia al estadio Antonio Vespucio Liberti, o como con su nuevo naming se hace llamar: Más Monumental.
La previa del encuentro fue tranquila, el coqueto barrio de Núñez se llenó del habitual color de los hinchas Millonarios, que sabían que enfrente estaría la Piponeta albiazul, pero tenían en claro que era una noche que exigía decir presente, que pedía aliento para el equipo y Marcelo Gallardo.
Es que Napoleón es indiscutido en el Monumental. Paula, que dialogó con nosotros junto a su padre Salvador, lo dejó bien en claro minutos previo al inicio del partido. “Como jugador nos dio todo, cómo técnico nos dio lo máximo que fue el 9-12 (la final de Libertadores ganada ante Boca), ¿cómo no vamos a bancar y amar a este hombre? El hincha de River quiere que se quede a vivir para siempre”.
Algo similar expresó la familia Álvarez, que nada tienen que ver con Julián, pero se animaron a posar para este diario y compartieron que volvían a ver al club de sus amores, juntos, luego de cinco años.
Ante la consulta de si creían que eran los últimos meses de Gallardo con la Banda, fueron enfáticos: “No”. Pero dejaron en claro que si su deseo es irse, les gustaría Gareca o Scaloni.
¿Premonición acaso?
De cara a un lejano futuro, eso que no se discuta. Pero una de las sorpresas presentes en el Monumental fue justamente el entrenador de la Selección Argentina. Lionel Scaloni llegó, recibió el amor de la gente y se ubicó en un palco a observar las acciones del partido.
Ver un poco a Armani, está claro, y algún juvenil del local. Pero ¿por qué no a alguno de los chicos de Gimnasia de gran campaña en la Liga Profesional?
Como detalle a destacar también, pasó desapercibida la presencia del técnico del Lobo. Vale recordar que Pipo Gorosito tuvo un positivo pasado en Núñez, pero no es muy bien recordado como entrenador. Tampoco hubo aplausos para Rey, quien surgió de la cantera Millonaria. Pero sí fuertes silbidos para Nicolás Colazo y Franco Soldano, ambos con pasado en Boca Juniors.