Estudiantes: el teléfono de Marcos, en Rojo
Tras el llamado de Verón, Riquelme volvió a tomar contacto con el defensor, que deberá decidir en las próximas horas por sí o por no. Le dio su palabra a Boca, pero el Pincha sigue jugando fuerte.
Entre la espada y la pared. En los últimos días el teléfono de Marcos Rojo recibió dos llamados cruciales. En primera instancia, Juan Román Riquelme, le hizo saber que lo quería cuanto antes entrenando con el plantel de Miguel Ángel Russo.
Ante esta situación, y al enterarse el presidente de Estudiantes de La Plata, Juan Sebastián Verón, que Rojo tenía posibilidades de desvincularse con el Machester United, La Bruja levantó el teléfono y le dijo: “No te puedo ver con otra camiseta que no sea la de Estudiantes”. Además, lo apuró al jugador y le afirmó: “Voy a igualar la oferta que te hagan desde Boca”.
El defensor mundialista en Brasil 2014 y Rusia 2018, quedó en responder en los próximos días, una vez que su desvinculación del elenco inglés se haga efectiva.
Sin embargo, luego del último llamado de Verón al jugador, Riquelme volvió a insistir y le dejó en claro que iba a ser de los mejores pagos del plantel y que es una prioridad en este mercado de pases. A su vez, el consejo de fútbol le envió una oferta formal a la representación del futbolista por dos años de contrato y una opción a uno más.
“Con Marcos (por Rojo) hay un acuerdo de palabra que ahora debe trasladarse al arreglo formal”, aseguraron a El Clásico de diario Hoy desde el Xeneize.
Por eso, la insistencia de Estudiantes generó cierta sorpresa en Boca, que entiende que no debería haber problemas para que el defensor cumpla con lo prometido.
Eso sí, tanto en el Consejo de Román como el Pincha esperan lo mismo: que termine de desvincularse ya mismo del United y por su cuenta. De lo contrario, aguardarán a que quede libre en junio.
A través de la gestión de su representante, el inglés Kristian Bereit, trabaja para rescindir su vínculo y resignar la última parte de su contrato.
El Manchester está dispuesto a dejarlo ir (ya que ya le comunicó que no lo tendrá más en cuenta y hasta le dio libertad para empezar a negociar con otro club su futuro cercano).
El central vino a pasar las Fiestas a La Plata y se sigue entrenando por su cuenta, con un preparador físico personal. Además, sumó algunos minutos de fútbol en Malvinas, el club de su barrio, que juega en la Liga Amateur Platense y que dirige su hermano Franco.