Gimnasia se trajo un premio más que merecido

El Lobo jugó en Bahía Blanca su mejor partido en la Superliga.  Generó muchas situaciones de gol pero derrotó por 1 a 0 a Olimpo con el tanto olímpico de Brahian Alemán 

Todo lo que no se le venía dando, se le dio. Gimnasia jugó el mejor partido en lo que va del campeonato, especialmente en la primera parte, se sacó la espina y pudo obtener la primera victoria para enderezar el rumbo. Fue 1 a 0 a Olimpo en Bahía Blanca, donde generó numerosas situaciones de gol, pero solamente pudo lastimar con un tanto atípico.

En los primeros minutos, apoyado en el sistema 3-1-4-2 que se adaptó muy bien a las dimensiones del Roberto Carminatti, el Lobo tuvo el pase preciso para encontrar los espacios y poder lastimar: primero Faravelli remató cruzado y desviado, y posteriormente fue Ibáñez el que no tuvo suerte. 

Olimpo, basado en un 4-4-2 característico, buscó a Troyanski y jugó por el sector de Licht, pero no encontró el camino y la figura de Alexis Martín Arias mostró solidez durante todo el cotejo. 

El Lobo cerró los espacios y atacó rápido con un Dibble muy picante, pero falló en el arco rival. A los 15 minutos recurrió a los remates de larga distancia: primero fue Bonifacio quien cortó y probó sin puntería, y en la siguiente Alemán tuvo espacios y exigió a Gabbarini.

A los 25, por medio de un córner, Alemán rompió la chapa al aprovechar el viento y clavarla, con gol olímpico, en el arco de Gabbarini.

En la siguiente, tras un remate en el palo, Martín Arias le sacó una pelota increíble a Herranz y Gimnasia no pudo liquidarlo debido a situaciones que falló increíblemente Ibáñez, primero de zurda y después en un mano a mano que definió mal. 

En el arranque del complemento, Gimnasia tuvo la oportunidad de sentenciarlo, pero la jugada personal de Dibble terminó con un remate defectuoso. 

El Lobo tuvo espacios, con un Olimpo obligado pero muy limitado. No obstante, no encontró los caminos ni el pase final para liquidar el pleito. Eso fue lo que le dio vida al Aurinegro, que pese a sus limitaciones siguió buscando, especialmente por derecha con el ingresado Gaona Luga.

Tomás Costa, por medio de un tiro libre, exigió a Martín Arias. El número 1 volvió a lucirse tras un centro en el que David Depetris le ganó la espalda a Omar Alderete.

En la réplica, llegados los 30 minutos, Agustín Bolívar comandó el contragolpe, ganó en velocidad y definió cruzado, pero Franco Niell no llegó a pellizcarla para sentenciar la cuenta. En este marco, el equipo de Mariano Soso desperdició una serie de avances en los que los ingresados Niell y Mazzola no tuvieron la confianza para lastimar.

Alemán se adueñó del juego, Rinaudo sacó todo y la solvencia de Martín Arias terminó de darle el triunfo al equipo albiazul, luego de intervenir en una serie de ocasiones ante el ingresado Depetris y los remates de Costa.

Gimnasia sufrió más de la cuenta, porque estuvo en condiciones de golear en Bahía Blanca pero falló en la puntada final en el primer tiempo. En tanto, se mostró sólido en defensa, a diferencia de los primeros partidos, lo que le permitió obtener un triunfazo, que le da confianza y otro aire en esta Superliga.

“Era para ganarlo por varios goles de diferencia”

Después de haber comenzado la Superliga sentado en el banco de los suplentes y sin haber sumado tan solo un minuto, Facundo Oreja fue titular en Bahía Blanca. El experimentado defensor no jugó en su posición natural de lateral derecho, sino que lo hizo de stopper por ese sector, en una línea de tres que mostró solvencia y seguridad. 

“Salió todo a la perfección. Muchas de las cosas que salieron las trabajamos en la semana. Era un partido para ganar por goleada, sobre todo en el primer tiempo, es la cuenta pendiente porque hicimos un gran encuentro”, analizó. 

En el análisis del cotejo, Oreja resaltó el rendimiento ofensivo del equipo y se diferenció de la estrategia que se utilizó en la última visita, cuando el Lobo era dirigido por Gustavo Alfaro. “Nosotros acá el año pasado no tuvimos ninguna chance y esta vez tuvimos un montón”, disparó. 

Por último, se refirió a su vuelta a la titularidad tras haber sido relegado al banco de los suplentes desde que asumió Mariano Soso. “Estoy feliz por el retorno. El DT entendió que era el momento y por suerte me tocó. Siempre creí en este proceso y, me toque jugar o no, voy a seguir pensando de la misma manera por el bien de Gimnasia”, manifestó Oreja.

Tres puntos y algo más para Ibáñez

Nicolás Ibáñez no tuvo su mejor tarde en Bahía Blanca. El goleador de Gimnasia en la última temporada no solo desperdició varias ocasiones claras para marcar, sino que además tuvo que ser reemplazado. A los 17 minutos del complemento, el delantero chocó con un defensor rival y sufrió un corte en el cuero cabelludo que lo obligó a retirarse del campo y ser reemplazado por Nicolás Mazzola. En el vestuario, los médicos debieron aplicarle tres puntos de sutura y vendarle la zona afectada. 

Otra vez la camiseta lució sin sponsor

Cuando todo indicaba que las negociaciones con las empresas que se habían mostrado interesadas en ser sponsors de la camiseta de Gimnasia estaban avanzadas, en las últimas horas los dirigentes redefinieron las estrategias en el mercado. 

En la previa del partido ante Huracán, desde el Departamento de Marketing habían asegurado que restaban detalles para que una compañía automotriz se convirtiera en el principal auspicio, pero nada de eso sucedió. 

Consultado por este medio, los directivos aclararon que se trata de una cuestión contractual, habida cuenta que buscan que el vínculo vaya más allá del actual torneo. “Es un tema que debemos resolver, buscamos un contrato más allá de este torneo”, indicaron.