Historias de fútbol, pasión y un amor animal

Por la pasión que despierta en los argentinos, nadie podría negar que el fútbol es mucho más que un deporte en nuestro país. Es una cuestión cultural arraigada en el sentimiento de las personas, que volvió a recuperarse este fin de semana con el inicio de los torneos más humildes del ascenso como los de la Primera D y B Metropolitana, en donde militan Defensores de Cambaceres y Villa San Carlos.

Con este acontecimiento volvieron a surgir historias de color, amor animal y pasión, como la que describe a Germán Pérez. Se trata de un fanático de Cambaceres, que además de vivir en Ensenada, forma parte de la Comisión Directiva del club.
El amor por los colores de su club lo llevó a hacer socia a su perra Rosita, de 16 años, con el único propósito de colaborar pagando una cuota más de socio en el círculo familiar.

Al principio sonaba raro: ¿una perra socia de un club de fútbol? Pero tras llegar a un acuerdo con la dirigencia, Rosita fue aceptada y se inscribió como socia dama del club con el número 001. Va a las asambleas, concurre a la cancha y en los entretiempos se come una hamburguesa como un hincha más.

El sábado, para no estar fuera de sintonía, concurrió al 12 de Octubre con un vestido con volados, que fue especialmente preparado para ver los partidos del Rojo.

Es la atracción en la platea de los pocos socios y dirigentes que pudieron acceder al estadio por la pandemia.

—¿Cómo se te ocurrió hacer socia a tu mascota?

—La idea surgió hace cuatro años. Me acompañaba a la cancha siempre y empezó a tomarle cariño a la platea. Siempre se quedaba en el mismo lugar abajo del solcito mientras se jugaban los partidos.

—¿De dónde sos vos?

—Somos del Barrio Campamento de Ensenada. En los últimos años siempre me acompañó a la cancha y los hinchas y los demás dirigentes ya la reconocen cono la mascota del club.

—¿Cuánto paga Rosita por mes para estar afiliada a Cambaceres?

—La cuota se paga de forma anual. Para el año que viene seguramente se ajuste un poco el valor, pero ella paga como socia dama. Son $140.

—¿Fue sencillo el trámite para que se registre a una perrita como socia?

—Al principio me preguntaba Por qué no hacerla socia. La idea es colaborar con el club pagando una cuota más. En su momento se lo pregunté al dirigente Sebastián Martinetti y la terminaron anotando.

—¿Y qué hace mientras vos ves los partidos?

—Ella está presente como un hincha más. Acompaña. Tiene su lugar preferido en la cancha, se come una hamburguesa en el entretiempo como cualquier otro hincha o dirigente y hasta va a las asambleas conmigo.

—¿Pero fue fácil?

—Me pidieron una foto, los datos y las asociaciones. Paga la cuota y también paga la entrada religiosamente.

—¿La entrada también?

—Y claro, no se va a colar. Además pertenece al grupo de los hinchas más conocidos de Camba.

—Se la ve muy bien de salud, ¿cuántos años tiene?

—Tiene 16 años. También me acompañó a la presentación de la última camiseta y la estamos preparando para el centenario del club, en donde también va a estar presente.