Las Tiburoncitas que luchan contra el Enard para defender al país en waterpolo

La historia de Faustina Escola y Agostina Cataldo, quienes fueron convocadas para jugar el torneo Panamericano Sub-19 de waterpolo en El Salvador, pero deben pagarse el viaje porque no hay fondos del Ente Nacional de Alto Rendimiento.

Con 86 años de vida y una sede en 46 entre 2 y 3, el Club Universitario de La Plata se ha convertido en uno de los más convocantes del deporte de la región durante las últimas tres décadas.

Desde aquella fundación el 3 de marzo de 1937 de la mano del vecino Eduardo Paolucci, hasta la presente inserción y desembarco de Marcelo Galland en el Ejecutivo de la Comuna platense luego de pasar varios años como presidente de la institución, miles de deportistas y vecinos de la ciudad formaron parte de alguna de tantas disciplinas que se practican en la región.

Además de nuclear al hockey y al rugby en el predio de Gonnet sobre el Camino Centenario (es junto a San Luis uno de pocos clubes que le hace lugar a estas dos disciplinas), también le abrió las puertas a los deportes acuáticos.

De allí que surgió la proyección de Celia Olmos como nadadora internacional representando a La Plata a partir de sus competencias y entrenamientos en el club. Y ahora también les dio lugar a dos jóvenes promesas del waterpolo que fueron convocadas para defender el honor de la Selección Argentina que va a disputar el torneo Panamericano en El Salvador.

Se trata de Agostina Cataldo, una joven de la ciudad que juega de wing en la U y viene realizando muy buenas actuaciones en su equipo y también de Faustina Escola, quien con 17 años es una de las mejores arqueras en proyección que tiene este deporte en el país.

Las dos forman parte de un listado de jugadoras que sueñan con seguir creciendo en esta disciplina, y pretenden viajar a El Salvador. Sin embargo, el Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (Enard) comunicó la quita de cualquier tipo de beca, subsidio o respaldo económico y el Gobierno no asumirá el costo de los pasajes ni de la estadía para que el país esté representado por estas jóvenes deportistas en el Panamericano de la categoría.

Christian Cataldo es el papá de una de las dos jugadoras y también se desempeña como director técnico y futbolista de la región. Lo hizo en Cambaceres y en la Liga Amateur Platense, en donde logró importantes títulos con ADIP hace menos de tres años. En esta ocasión, se puso al frente de una campaña para lograr el objetivo de poder concretar el viaje, que tiene un costo operativo de 3.000 dólares por cada jugadora que quiera representar al país en esta competencia.

Se trata de una cifra similar a la venta de un auto usado, de una moto o de un ahorro de muchos años para cualquier familia de clase media.

Si bien hay gestiones con la comuna y no se descarta un pedido al mismísimo exintendente Garro, quien aceptó coordinar el área de Deportes del Gobierno nacional, las dos jugadoras de la U hasta el momento no podrían viajar.

De todos modos, la familia puso a disposición los siguientes contactos: 221 632 06 10. O bien al sitio @tiburoncitas.wp o las cuentas CBU 0140000701100004451310, o al alias CADDA-PROVINCIA.

Noticias Relacionadas