Más de 80.000 hinchas de la Selección y mucho color para ser locales en la final

Enviados especiales al Mundial

La Federación Internacional de Fútbol Asociado aceptó negociar con la AFA las condiciones de ingreso de los hinchas argentinos a los fines de darle un marco colorido e imponente al recibimiento de los jugadores en la final del mundo.

Tal cual ocurre en la República Argentina cuando un equipo pone en juego el título, hoy (a excepción de la pirotecnia) habrá de todo: banderas tirantes, banderas gigantes y globos con la imagen de Messi.

Todo se fue organizando y coordinando en las últimas 48 horas sobre la marcha, de forma simultánea a la llegada de miles de argentinos que viajaron para intentar ver el último partido de la Copa del Mundo.

Hasta el momento aquí en Doha, la Policía y el personal de seguridad privada en los ingresos a los estadios se habían mostrado muy estrictos con las banderas o inscripciones alusivas a pedidos o referencias geográficas del país. Sin ir más lejos, los policías cataríes estaban muy pendientes de que no se ingresen banderas o remeras con leyendas vinculadas a la libertad sexual o al colectivo LGTB, por considerar que se podía utilizar la pantalla de la Copa del Mundo para hacer “apología”.

De todas maneras para este encuentro decisivo todo está armado para que los propios hinchas puedan organizar una fiesta sin antecedentes en la definición de los mundiales y que Argentina sea más local que nunca ante Francia.

Todos quieren que Messi gane la Copa

Ni siquiera los hinchas o periodistas franceses o brasileños verían con malos ojos que la Selección Argentina se quede con el Mundial de fútbol y que consecuentemente a este Lionel Messi levante la Copa del Mundo.

La “messimanía” venía ganando las calles de Doha desde que se inició el Mundial y los sobrevivientes hinchas de Arabia Saudita o Marruecos que hoy irán a la cancha porque habían comprado una entrada se terminaron dando vuelta y quieren ver al mejor jugador del mundo con el trofeo que le falta.

No habrá que extrañarse si hoy en cada ataque de Francia se escucha un abucheo que confirme la simpatía por el Seleccionado Nacional para el partido de este mediodía.

Todos quieren que Messi gane la Copa, pero también hay una enorme expectativa por el nivel de juego que se muestre en la final.