Silenciaron a las chicas de waterpolo que buscan competir en el Panamericano Sub-19

En pleno proceso de preparación para defender al país en el torneo Panamericano Sub-19 de waterpolo, las integrantes de la Selección Argentina recibieron una llamativa sugerencia por parte de entrenadores y directivos de esta disciplina para evitar una sobreexposición sobre lo que está ocurriendo con este deporte.

La semana pasada, dos jugadoras de la región que surgieron en Universitario, Agostina Cataldo y Faustina Escola, admitieron la preocupación que despertaba el hecho de no saber cómo hacer para poder cumplir el sueño de poder defender al país en este deporte ante la falta de respaldo del Gobierno nacional.

Las jugadoras, dirigentes y entrenadores habían sido informados que desde el Cenard (Centro de Alto Rendimiento Deportivo) de la nación no había presupuesto para costear el viaje de las jugadoras y se calcula una inversión general de 3 mil dólares por cada deportista para concurrir al Panamericano.

Las Tiburoncitas iniciaron una campaña para poder encontrar apoyo con esponsoreo o directamente con dinero que algunos privados pudiesen donar y de esta forma achicar la brecha económica que en la actualidad separa el sueño de cualquier argentino que quiere viajar al exterior debido a los costos de los pasajes en dólares.

Si bien no se confirmó que el Cenard o la Secretaría de Deportes de la nación vaya a resolver este contratiempo en las próximas semanas, las jugadores seguirán entrenando con la incertidumbre de poder participar en la competencia, que además otorgará plazas para el Mundial de waterpolo Sub-19.

Un problema general del deporte

No solamente la falta de presupuesto preocupa a las chicas del Sub-19 de Waterpolo. También hay integrantes de otras disciplinas amateurs del país que están buscando fondos para poder viajar a competir en los Juegos Olímpicos de París y otros tantos Atletas que han decidido bajar cualquier ambición de poder estar en la competencia internacional más relevante del deporte que se disputa cada cuatro años y acapara la atención de todo el planeta, por una cuestión de presupuesto.

El equipo de hockey, por ejemplo, fijó como regla que todas las jugadoras de Las Leonas se vengan a jugar al país durante el primer semestre del 2024 con la finalidad de poder estar en el mismo territorio nacional para entrenarse y no perder el contacto todas las semanas.