Un año sin Fernando Báez Sosa: el avance del programa “Rugby 2030, hacia una nueva cultura”

El asesinato de Fernando Báez Sosa por intermedio del salvaje ataque de un grupo de rugbiers del Club Arsenal Zárate puso a la disciplina, que hasta ese momento gozaba de una imagen sana y de modelo hacia la sociedad fundamentalmente por Los Pumas, bajo la lupa. La condena social fue en aumento luego de la difusión de otros hechos de violencia generados por jóvenes con vínculo con la ovalada. A partir del cuestionamiento de la sociedad, la Unión Argentina de Rugby dio a conocer “Rugby 2030, hacia una nueva cultura”. El Clásico te cuenta en detalle cómo se estuvo trabajando en estos meses, el balance de lo logrado hasta el momento y qué se espera conseguir a futuro.

Según explicó la UAR, el programa “tiene como objetivo reconocer, responsabilizar y resolver la conflictividad relacionada con el rugby en la Argentina, buscando crear una nueva cultura acorde a nuestros tiempos, reduciendo la violencia en todos sus aspectos”.

La iniciativa abarca 24 módulos que comenzaron a implementarse el año pasado, comprenderá también el 2021 e involucra a todas las partes del rugby nacional: directivos, entrenadores, jugadores, familias, uniones y clubes, “hacia una transformación profunda en estos tiempos que corren”.

La entidad madre del rugby argentino reconoció que el trabajo se inició “a raíz de una sucesión de hechos de violencia que se venían registrando en los medios y monitoreando por la UAR y con el asesinato de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell, como punto de inflexión”.

Marcelo Rodríguez, presidente de la Unión Argentina de Rugby, afirmó: “Creemos que el mejor legado para las generaciones futuras del rugby argentino es asumir todos juntos este reto que implica una nueva cultura del rugby acorde a una sociedad del siglo XXI. Son 130 mil chicos y chicas que juegan en Argentina y tenemos la oportunidad de formarlos y contenerlos, con el rugby como una herramienta de verdadera integración social”.

El escándalo: los tuits de Los Pumas

El 2020 se fue con un mensaje oficial en el día de los inocentes, pero firmado por la UAR. La Unión pretendió cerrar la polémica y el repudio generalizado por los mensajes racistas de Pablo Matera, Guido Petti y Santiago Socino, realizados cuando eran rugbiers juveniles, hace unos ocho años.
Tras el quite de la capitanía al ahora jugador del Stade Français, de la exclusión de los tres Pumas del último partido del año contra Australia y un formal pedido de disculpas, la UAR les impuso una serie de requisitos (irrisorios) a cumplir para volver a integrar el seleccionado nacional.

Lo que se viene en 2021, según la UAR

Hasta el momento, el programa consistió en llevar adelante una encuesta en la que participaron más de 25.000 personas del mundo del rugby (jugadores, entrenadores, dirigentes, socios, etc.), que representan la línea de base para este programa. También se trabajó junto a entrenadores de las categorías de 6 a 9 años, para incorporar ciertas destrezas enfocadas en cómo debe ser un jugador de rugby.

Además, gracias al relevamiento que se realiza con clubes, se implementa previamente la prueba piloto de este programa, que pretende crear espacios de interacción entre el club y las escuelas a las que van los chicos.

En lo inmediato, se llevarán adelante otros programas: “prejuicios y estereotipos discriminadores”, “un deportista en la familia”, “códigos disciplinarios”, y “comunicación entre entrenadores y jugadores”, entre otros.

Lejos de generalizar o llevar la situación a un extremo, el ambiente del rugby está obligado a deconstruirse después de un 2020 que lo dejó expuesto por el homicidio de Fernando, los ataques en patota, los mensajes xenófobos de jugadores de su élite y el maltrato hacia las mujeres.