Déjate querer: el amor por sobre toda diferencia social

A mediados de los 90, Catherine Fulop gozaba del éxito construido con sus participaciones actorales en proyectos de primera línea, como Abigail y Mundo de fiera. Mientras, Carlos Mata era el galán más codiciado. Ambos fueron tentados para protagonizar Déjate querer, una novela romántica que sería producida por Telefé y cuyas escenas se grabarían entre el Caribe, Argentina y Europa.

La trama revelaba las mentiras de la clase alta y la eterna insistencia de los trabajadores por progresar y hacer de este mundo un lugar mejor. De esta manera, Bárbara Sánchez (Catherine Fulop) trabajaba como modelo para financiar sus estudios y recibirse prontamente de abogada. Su único fin en esta vida era lograr liberar a su papá, que estaba preso por un crimen que no había cometido.

Por su parte, Germán Machado (Carlos Mata) era arquitecto, estaba comprometido y era hijo de un empresario poderoso.
Debido a las casualidades de la vida, ellos estarían destinados a conocerse por una situación imprevista; ella creía que él era un trabajador humilde en búsqueda de justicia. Así entablaron una relación, en la que Mata no dijo la verdad y vivía una doble vida. Además, un oscuro secreto unía a sus familias más de lo que se imaginaban.

En una manifestación organizada por los empleados de una multinacional, descubrieron que el papá de Bárbara estaba tras las rejas por una hazaña ilegal en manos del progenitor de Germán. Esta situación disparó la búsqueda de venganza y justicia.

El elenco de la producción internacional terminaba de completarse junto a Manuel Carrillo, Henry Zakka y Alfredo Zemma.

Por aquél entonces, Catherine Fulop estaba casada con Fernando Carrillo, otro galán de telenovelas que la acompañó en los rodajes. La relación presentó señales de una crisis y posterior separación. Cada uno siguió su camino, pero ella se enamoró de un compañero del elenco, Osvaldo Sabatini, con quien se casó, formó una familia con dos hijas y continúan juntos hasta el día de hoy. Vale mencionar que ambos son actores y participan de diversos proyectos de cine, teatro y televisión.

Por su parte, el galán venezolano

Carlos Mata también formó una familia, continuó con otros proyectos en novelas y comedias familiares. Además, decidió instalarse en Miami, Estados Unidos donde transita la pandemia en la calidez de su hogar.