“Este álbum fue un motor para seguir en la búsqueda creativa”

Con un nuevo formato electrónico, el proyecto Sincronizados presenta su último trabajo musical. Además este dueto integrado por los hermanos Ariel y Belén Giordano se preparan para volver a los escenarios. Es por ello que el músico dialogó con este multimedio sobre los objetivos y expectativas por cumplir.

—¿Qué se traen entre manos para este momento?

—Tenemos muchas ganas de compartir el material nuevo que estuvimos trabajando durante los últimos dos años: un disco que nos motivó a seguir adelante con Sincronizados, proyecto que siempre está mutando. En esta ocasión, sucedió con ese concepto de transformación constante.

Este álbum fue un motor para seguir en la búsqueda creativa a pesar de la inactividad musical de los últimos tiempos.

—¿De qué manera viven esta apertura paulatina y la vuelta a los shows?

—De a poco creo que todos nos fuimos adaptando a las nuevas realidades y, en el caso de este proyecto, siento que se fueron dando las cosas para volcar el sonido a este nuevo formato. Hoy, las voces de Sincronizados somos dos, mi hermana Belén y yo. Y estamos trabajando en diferentes posibilidades de formatos para volver a los vivos, dadas las nuevas normas y las capacidades. Cuando podamos volver a ser muchos en un escenario, seguro lo haremos. Mientras tanto estamos en el formato dúo, con un set más electrónico.

Estamos presentando nuestro tercer álbum que se llama Mutant3. Es un disco con diez canciones nuevas, con un sonido mucho más electrónico y digital que los dos discos anteriores pero manteniendo la esencia del género funk. El material reciente fue grabado sin apuros, de una manera muy artesanal y profesional a la vez. Empezamos la preproducción con un punto de partida claro pero fuimos encontrando muchas posibilidades de sonidos nuevos en el viaje de la producción junto a muchos artistas que fueron aportando su granito de arena para que Mutant3 suene de esta forma: Juli Sáenz, Facundo Radu, Zake Rengifo, Franqui Quiroga, Gero Franco, Leo Barrasso, Caro Cristaldo, Mono Fantaguzzi, Luis Álvarez, y Brian Vaingverg. La mezcla y masterización fue de la mano del amigo Cana San Martin. Ya veníamos trabajando con él desde el 2018 cuando habíamos lanzado el single Tarde y en lo personal, seguí trabajando con él todos estos años en discos y producciones que hicimos para otros artistas.

—¿Qué análisis realizan de la actual escena y sus múltiples propuestas?

—Está repleta de aristas interesantes y variadas. Tengo la suerte de ser parte de varios proyectos desde el lugar de la producción y noto que durante la pandemia se siguió laburando muchísimo en generar contenidos musicales.

Creo que es momento de volver a organizarnos para retomar la experiencia de la música en vivo en todo tipo de escenarios. A nivel cultural, siento que estamos atravesando un periodo de poliamor musical donde pueden convivir perfectamente el género

urbano, el rock, la cumbia, la electrónica, el pop y cualquier tipo de género dentro una misma playlist de cualquier escuchante. Eso genera una diversidad musical que para mí es hermosa y me es muy fácil de incorporar, tal vez porque siempre mis CDs compilados fueron una ensalada de frutas de estilos musicales. Y particularmente, también estoy disfrutando mucho de todo lo cercano al rap, al lofi, al R&B, la electrónica y el funk, que siempre fue la música que más me gustó.

—¿Qué opinan sobre las nuevas formas de producción y lanzamiento que imperan en la actualidad?

—Son tantas y diferentes que supongo que siempre va haber lugar para que haya nuevas formas.

En cuanto a productores argentinos del momento, Bizarrap o Nico Cotton son referentes para mí y les tengo mucha admiración. Disfruto de los sonidos nuevos que proponen. No solamente de ellos, sino que trato de estar al tanto de lo que suena porque realmente estoy disfrutando del momento musical tanto local como mundial.

Creo que estamos un poco todos en la misma, escuchando y viendo los Tiny Desk, Colors, Sessions. Los sonidos nuevos están re buenos y la tecnología aporta mucho a la experiencia de escuchar música. Más allá del romanticismo al CD y los vinilos, la manera de acceder hoy a la música es un gol.

En cuanto a las formas de lanzamiento, con Mutant3 quizás fuimos un poco más vieja escuela; no porque no querer adaptarnos a la ola de sacar canciones sueltas, sino más bien por la necesidad de crear un concepto más grande que necesitaba tener diez canciones nuevas.