La trágica vida de Anna Nicole Smith

De forma reciente se estrenó un documental sobre la modelo y mediática Anna Nicole Smith que revela gran parte de los sucesos que marcaron su vida. Se llama Tú no me conoces y da cuenta de todos los secretos de la modelo nacida en 1967. El documental está configurado por imágenes de archivo, muchas de ellas inéditas, en las que la blonda va develando sus inicios en el mundo del entretenimiento.

Con un 1.80m de altura y una presencia descomunal, la joven se crió en un pueblo de Texas, donde entrada su juventud empezó a trabajar en una casa que vendía pollo frito y allí conoció a un cocinero que se convertiría en el padre de su primer hijo, llamado Daniel.

Los tortolitos se engancharon a primera vista, tuvieron un noviazgo breve, pasaron por el altar y le dieron la bienvenida a su primogénito. Sin embargo, la relación no prosperó y la separación se hizo un hecho. Así, la mujer empezó a probar suerte como bailarina exótica, con su ingreso en un club en donde rápidamente fue una de las figuras sin precedentes. Y luego, como modelo, llegó hasta la portada de la mítica e icónica revista para hombres Playboy.

Esa participación le permitió, por ejemplo, conseguir un rol en la taquillera saga de La pistola desnuda, junto al emblemático Leslie Nielsen.

Toda su vida fue el centro de atención por su sensualidad, y llamaba la atención de todos. Esto le sirvió como puntapié para su carrera mediática.

Al momento de su divorcio, la mujer se fue con su hijo rumbo a Houston, donde empezó a trabajar en un bar de noche, y fue ayudada por otra bailarina más grande. En esos tiempos comenzó una relación amorosa con su amiga y fueron amantes durante un tiempo considerable.

Por otro lado, la mujer quiso modificar su apariencia, por lo que cambió el color de su cabello a rubio claro y además operó sus senos. Pero no todo era color de rosas, porque la cirugía plástica la dejó tan dolorida que comenzó a consumir calmantes como si no hubiera un mañana y empezó un camino en las adicciones, que sería solo de ida.

Su vida estaba por cambiar cuando conoció a Howard Marshall, un empresario del petróleo que la superaba en edad y con quien se casó, tras lo cual Smith dejó sus tres trabajos. En ese marco, obtuvo una audición para ser parte de la empresa Playboy.

Por otro lado, la fama la ayudaría a encontrar a su papá, a quien no había conocido. Es por ello que, luego de ser la playmate del año 1993, se puso en campaña para encontrar a su progenitor y así componer su familia. A su vez, hacía campañas para marcas de ropa, para películas y proyectos independientes.

El encuentro con su padre fue en un viaje a Dísney, pero todo terminó en una pesadilla: el hombre fue acusado de intentar abusar de ella y nunca más se vieron. Esta aberrante situación motivó que se abocara al alcohol y las pastillas, pero pudo superarlo, aunque las recaídas fueron muy intensas.

Smith tuvo otro contratiempo porque falleció su esposo, fue a juicio contra sus hijastros y lo perdió, quedándose sin un peso. Posteriormente se obsesionó con su cuerpo y comenzó una dieta estricta.

En ese contexto, comenzó a salir con su abogado Howard Stern y quedó embarazada. Muchos años después se supo que la bebé era la hija de su fotógrafo, llamado Larry Birkheard. La pareja se fue a vivir a Bahamas. A los tres días del nacimiento de la niña, el hijo mayor de Anna se mató por una sobredosis de medicamentos.

Este dolor fue imposible de soportar, y Smith volvió a caer en una depresión absoluta que la llevó a una muerte por ingesta de calmantes.