Los escándalos maritales en la Corona inglesa

Siempre creímos que en los cuentos de príncipes y princesas todo era color de rosas, y había amor, aventuras y finales felices, pero en la historia real de la monarquía inglesa, en especial en la relación entre Lady Di y el príncipe Carlos, todo esto estaba muy lejos de ser así. De esta manera, el vínculo se llenó de engaños y malos tratos, con un divorcio que puso fin a un matrimonio violento y repleto de desamor.

La primera vez que se vieron Diana y Carlos fue en un viaje de fin de semana, en el que coincidieron junto a sus familias. Recordemos que él salía con la hermana mayor de la mujer, que por entonces era solo una colegiala. Tuvieron una buena energía, y con los años volverían a reunirse para empezar a salir y así terminar casándose en lo que fue la boda del siglo. Recordemos que ambos integraban clanes aristocráticos.

Luego del matrimonio, Diana supo que su esposo también estaba aliado a su mejor amiga Camilla Parker Bowles: salían en secreto, y nunca pudieron concretar este amor porque ya estaban en diferentes matrimonios.

Con el correr de los años llegaron los hijos, William y Harry, pero esto no facilitó nada, por el contrario los alejó, y además ella tenía una profunda depresión y los primeros indicios de una bulimia intensa, que tardaría años en curar.

A mediados de los noventa la relación se terminó, y comenzó un circo mediático por la tenencia de los niños. Se filtraron las infidelidades de cada parte y además salieron más tarde los papeles del divorcio. Las partes llegaron a un acuerdo en el que Diana recibiría una gran suma de dinero, pero debería renunciar a sus títulos nobiliarios. Sin embargo, no pudo ser concretado porque falleció en el túnel del Puente del Alma, en París, cuando salía de cenar con su novio, Dodi Al-Fayed, y el chofer conducía a toda velocidad. Tuvieron un accidente del que nadie salió con vida.

Finalmente, Carlos dejó pasar unos años, se casó con Camilla y asumió como rey de Inglaterra.

Los hijos de Lady Di y sus amores

Los hijos de Lady Di han hecho su camino. Por su parte, William fundó una familia con una joven que conoció en la universidad y se llama Kate Middleton. Han fundado una familia con tres hijos, y son de los preferidos por los ingleses. La pareja salió unos años, pudo seguir adelante con el casamiento y hoy lidera las encuestas entre los preferidos. Pero no todo es color de rosas, porque el hombre fue vinculado a una mujer de la realeza, la esposa de un cónsul, y fueron vistos muy juntos en unas vacaciones improvisadas, pero todo fue desmentido y quedó en la nada. De hecho, la pareja aumentó su popularidad, comenzó una campaña para mostrarse en situaciones cotidianas y alzó su imagen para las encuestas.

Por su parte, Harry conoció a una actriz canadiense llamada Meghan Markle, que trabajaba en una serie llamada Suits. Luego de salir por dos años, la pareja se casó y se fue a vivir a Londres. Allí, ella debió renunciar a sus oficios para abocarse a su trabajo como figura real. Pero no todo lo que brilla es oro, porque después de dos años, la pareja se fue con rumbo a Estados Unidos. Renunciaron a los títulos para luego anunciar que fueron difamados y perseguidos. Además, Meghan había sido discriminada por ser descendiente de una madre afroamericana. También temían que los niños fueran de color antes de que nacieran Archie y Lili, que ahora son dos infantes. Luego comenzaron a trabajar en el lanzamiento de un libro llamado Spare, que relata las vivencias del pelirrojo, también en la serie homónima, que cuenta el detrás de escena de la pareja, y en un podcast que los tiene como protagonistas. Además, en los últimos días surgió el rumor de una crisis que los tendría a mal traer por sus problemas financieros. Esto los llevaría a una terapia de pareja para salir adelante, sumado a una mudanza.

Sarah y Andrés, en sagrado matrimonio

Cuando Carlos y Diana se conocieron, enseguida comenzaron a vivir una vida social ajetreada repleta de compromisos y vaivenes, de aquí para allá. Asimismo, sus pares comenzaron a conocerse y así fue como el hermano de Carlos, Andrés de York, y la mejor amiga de Diana, Sarah Ferguson, fueron presentados en sociedad, y el flechazo fue inmediato. Los tortolitos empezaron a salir por fuera del raid mediático para ponerse luego en una relación formal. Con el correr de los años, los chicos, que por ese entonces atravesaban sus veintitantos años, se tomaron un tiempo considerable para pensar cuáles iban a ser sus próximos pasos a seguir. Recordemos que la familia real es el centro de atención en Inglaterra, y sus acciones siempre son tenidas en cuenta. Así que, luego de meditarlo, decidieron tomar el toro por las astas y dieron el feliz anuncio de compromiso. Tan solo unos meses después pasarían por el altar, y la boda también se televisaría, pero no con la misma intensidad que la de Carlos y Diana. Asimismo, les dieron la bienvenida a sus dos hijas, llamadas Eugenia y Beatriz. La familia entera vivía en una de las propiedades de la familia real en Londres. Con el paso del tiempo, las asperezas en el matrimonio se intensificaron, por lo que cada uno siguió su camino. Además, salieron a la luz infidelidades. Asimismo hoy, ambos, que ya están grandes, conviven bajo el mismo techo. Recordemos que Isabel dejó a sus mascotas a cargo de Sarah, para que velara por su seguridad. Por otro lado, ella combate contra una enfermedad que le fue diagnosticada de forma reciente. También comparten gastos debido a que viven bajo el mismo techo, porque él quedó sin un peso luego de pagar la indemnización a una chica que lo acusó por una violación que habría sucedido cuando era una adolescente. Este acuerdo se dio en el ámbito de lo privado.

Harry está en aprietos

El hombre aceptó irse del viejo continente para volver a empezar en Estados Unidos como dueño de una productora audiovisual. Primero lanzó su libro de biografías, en el que daba cuenta de su vida junto a su padre y sus peleas con este, que fueron un hito en su vida. Luego habló de cuando era soldado y ejercía su rol. También de la relación con las drogas desde su temprana edad, y su primera vez junto a una mujer mayor, que fue una experiencia sexual polémica. Luego lanzó la serie junto a su esposa, en la que se exponían los escándalos con la Corona inglesa y sus destratos. Luego del éxito de estos lanzamientos, no pudieron seguir cuesta arriba con los proyectos porque las empresas que los habían contratado dieron por terminados sus contratos, debido a la falta de ideas. Ahora se van a mudar a California para cambiar de aire, y quieren volver a empezar y tener un manto de tranquilidad luego de la exposición. Por su parte, la Corona borró de los registros a Meghan, que ahora solo figura como madre de Archie, pero sin sus datos, tal como le hicieron a Lady Di en su momento.