Michelle Pfeiffer, una diva eterna

La actriz está trabajando en una producción independiente. Mientras, se animará a dar sus primeros pasos como conductora.

Durante la década de 1980, Michelle Pfeiffer incursionó en el séptimo arte para adoptarlo como una forma de vida. En ese vaivén de alfombra roja, flashes y compromisos laborales, la mujer llegó a estar nominada en tres oportunidades a los premios Oscar. Es más, llegó nuevamente a los rodajes gracias a la comedia French exit que la tendrá como protagonista interpretando a una mujer fuera de sí y completamente grosera.
Nacida en California, Michelle inició su carrera como modelo publicitaria y luego debutó por la puerta grande con Los caballeros de Hollywood.

Luego, integró la segunda entrega de Grease. Sin embargo, su gran oportunidad estaría de la mano de El precio del poder junto a Al Pacino. Desde ese momento ha trabajado sin descanso alguno y pudo lucirse en Las brujas de Eastwick, Casada con todos, Las amistades peligrosas, Batman returns, y La edad de la inocencia.

En pleno apogeo de su carrera, la mujer decidió poner un freno porque se había casado, tenía dos hijos y las prioridades habían cambiado. Así fue como por un buen lapso de tiempo, lo dejó todo para abocarse a su casa.

Al respecto, avizoró: “Cuando trabajaba, trabajaba mucho. Entonces creo que la gente se acostumbró a verme mucho. Antes de que nacieran los niños, mi trabajo era mi vida, y estaba en el buen sentido. Cuando eran pequeños, podía llevarlos conmigo, pero luego se volvió más complicado. Se convirtió en un desafío para los directores contratarme y era más fácil conseguir que otra persona hiciera el papel”.

Además, está casada con el productor de televisión David Kelley y su secreto para el matrimonio está dado en la independencia: “Somos lo suficientemente diferentes como para mantener el interés el uno por el otro, pero somos increíblemente compatibles. Creo que nuestras prioridades están muy bien adaptadas. Y elegí bien, elegí uno realmente bueno”, confesó.

Tras lanzarse como productora, también incursionó en la empresa cosmética que fundó llamada Henry Rose con exclusivas líneas de perfumes y está ensayando una obra para teatro. Además, encarnará a Betty Ford en la serie La primera dama, que se basará en tres esposas de presidentes norteamericanos.

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