Adiós a Horacio González, el sabio de la tribu

El reconocido investigador, docente y sociólogo Horacio González, falleció este martes a los 77 años, tras varias semanas internado como consecuencia de contraer coronavirus el pasado mes de mayo.

González debió ser internado el 19 de mayo por un agravamiento de su cuadro de salud, y a pesar de mostrar mejorías durante su periodo de internación, en las últimas semanas su estado volvió a complicarse y permanecía sedado e intubado.

La partida de González fue comunicada por el periodista Daniel Tognetti a través de su cuenta personal de Twitter: "Falleció Horacio González. Liliana herrero, su mujer, me pidió que lo comunique".

Sociólogo, novelista, docente, exdirector de la Biblioteca Nacional, intelectual crítico que hizo suyo el legado jauretcheano al que apoyó sobre un hondo sustento filosófico.

En la década del 60, junto a la inolvidable Alcira Argumedo, fue uno de los fundadores de las Cátedras Nacionales, que en lo esencial buscaban llegar a una síntesis entre el pensamiento marxista y el nacionalismo de raíz peronista. Se doctoró en Sociología en la Universidad de San Pablo, Brasil, y recibió la distinción Honoris Causa de la Universidad Autónoma de Entre Ríos y de la Universidad Nacional de La Plata, acto este último en el que su amigo Fito Páez quiso estar presente con su música.

A mediados de 2008 creó Carta Abierta, un espacio destinado a confrontar contra los discursos de los grandes medios y la derecha ideológica de mercado.

Su pluma era fácilmente reconocible en los numerosos documentos producidos, en los que se vindicaba la recuperación de una palabra crítica que se hiciera cargo de los conflictos nacionales y latinoamericanos, procurando articular una relación fluida entre los intelectuales y el pueblo, como vía necesaria para lograr una transformación política profunda.

Muchas de esas epístolas nacidas de la inspiración de Horacio González en nombre de Carta Abierta tienen una gran vigencia y merecen seguir siendo debatidas, porque los temas abordados permanecen irresueltos: el papel de las grandes corporaciones mediáticas, la crisis del Poder Judicial, el capital concentrado de la agroganadería, la explotación ­desenfrenada del subsuelo, el acoso que sufren los gobiernos populares que buscan mitigar la desigualdad social. Releer esos textos será una manera de seguir teniendo a Horacio González con nosotros.