Encuentran un antiguo osario de animales y humanos
En la cueva de Umm Jirsan, al noroeste de Arabia Saudita, fueron hallados cientos de miles de huesos. Los investigadores creen que las hienas llevan siete mil años recopilando los restos.
Tal como acaba de confirmar un estudio publicado en la revista Archaeological and Anthropological Sciences fue hallada una gigantesca y ancestral alfombra de huesos en una cueva de Arabia Saudita. Los autores informan que los cientos de miles de restos pertenecen, al menos, a catorce tipos diferentes de animales, como ganado, caballos, camellos, roedores y otras especies. Además, algunos de esos restos óseos pertenecerían a humanos. Por lo tanto, futuros estudios podrían arrojar luz sobre la zona y sus antiguos moradores.
El osario se encuentra en la cueva de Umm Jirsan, en los campos volcánicos de Harrat Khaybar, al noroeste de Arabia Saudita. La cavidad, un tubo de lava creado por coladas, se extiende a través de 1,5 kilómetros de longitud, lo que la convierte en la cueva de ese tipo más larga del país. “Este tubo de lava está repleto de cientos de miles de restos de animales bellamente conservados”, dice el zooarqueólogo Mathew Stewart, del Instituto Max Planck de Ecología Química en Alemania.
De acuerdo a la opinión de los investigadores, este enorme osario posiblemente fue creado por especímenes de hiena rayada (Hyaena hyaena), cuyos propios restos también se encontraron en la cueva, junto con sus excrementos fosilizados. Los investigadores creen que las hienas llevan unos siete mil años recopilando todos estos restos en su guarida.
“Estos animales son ávidos recolectores de huesos, que transportan a las guaridas para ser consumidos en el momento, alimentar a las crías o almacenarlos para después”, señala Stewart. “En conjunto, el gran tamaño, la sobreabundancia y el procesamiento intensivo de los huesos ungulados de las extremidades, abundantes coprolitos de hiena (excrementos) y la presencia de hiena juvenil y restos craneales humanos sugieren que Umm Jirsan sirvió principalmente como guarida de hiena rayada y, en ocasiones, como guarida materna”.
Pareciera que no se trata de una mera reliquia del pasado. Durante una investigación en 2007 los investigadores escucharon gruñidos en la cueva, lo que sugiere que Umm Jirsan podría seguir siendo utilizada por las hienas incluso en la actualidad.