Indignación en la comunidad educativa de la escuela n° 31 de Tolosa
Durante la madrugada del lunes, no solamente provocaron destrozos, sino que se robaron dos bombas de agua, justo en el mes en el que arranca el verano y se requiere más que nunca del mineral para el consumo de los alumnos.
Una enorme sensación de angustia e indignación invadió a padres, alumnos y personal docente de la escuela primaria n° 31 de Tolosa, tras los destrozos que se provocaron durante el fin de semana, en la previa al inicio de la primera semana completa del último mes del año.
En el edificio que funciona en calle 3 entre 527 y 528 rompieron los vidrios y forzaron el portón de ingreso, pero la sorpresa mayor fue lo que encontraron los docentes una vez que ingresaron a la escuela el lunes después de las siete de la mañana: un gigantesco charco de agua había ganado protagonismo en el salón de ingreso a la institución y el servicio permanecía cortado.
Después de algunos minutos de inspeccionar la zona, algunas porteras confirmaron la desaparición de dos bombas de agua que habían sido colocadas recientemente como parte del mantenimiento que había otorgado el Consejo Escolar, a los fines de que la escuela 31 pueda seguir funcionando y se pudiese garantizar el agua para los meses más calurosos del año en el paso de la primavera y el verano.
En esta época del año se consume mucha más agua que en otras ocasiones, por lo que resulta imposible dictar clases sin agua en el lugar.
La bibliotecaria del lugar aseguró que el mayor grado de indignación se produjo cuando las autoridades del lugar se dieron cuenta de que no se trataba de un ataque vandálico más, sino que se había concretado el robo de las bombas que habían sido compradas recientemente.
Si bien la directora y las docentes no quisieron brindar detalles y dejaron actuar a la justicia con el accionar de las pericias en la escuela, hubo madres y padres que se reunieron en la puerta de la escuela, sobre calle 3, que se reunieron y pidieron explicaciones a modo de queja por el accionar de los delincuentes, aunque entendiendo que la suspensión de las clases no tenía que ver con la decisión de las autoridades de la escuela.
Ahora, desde el Consejo Escolar saliente, intentarán reponer las bombas en los últimos cuatro días de gestión (el viernes es feriado y el domingo se producirá el cambio de gobierno en La Plata) para evitar que los chicos de esta escuela de Tolosa sigan sin clases durante toda la semana.