Investigador del Conicet presentó el hallazgo de una bacteria de 7.000 años de antigüedad

En la sede del Instituto Colombiano de Antropología e Historia (Icanh), el investigador del Conicet Miguel Delgado, lideró la revelación de un hallazgo excepcional en el ámbito de la paleogenómica: la identificación de una bacteria de 7.000 años de antigüedad en el sitio arqueológico de Tequendama, en la Sabana de Bogotá, Colombia.

El estudio, centrado en el análisis paleogenómico de un patógeno proveniente de un individuo que habitó hace milenios en Tequendama, se basa en evidencias arqueológicas y genómicas para reconstruir la historia genética de las poblaciones antiguas que ocuparon el territorio colombiano en tiempos prehispánicos.

En palabras del investigador, el enfoque de la investigación va más allá de la mera identificación del patógeno, sino que se extiende a la comprensión de la evolución de los organismos causantes de enfermedades en la región antes de la llegada de los europeos. El equipo, mediante el análisis de ADN antiguo, logró detectar el genoma del Treponema, un grupo diverso de bacterias, que se estima como el más antiguo conocido hasta la fecha.

Miguel Delgado, quien dirige el proyecto y es parte de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la Universidad Nacional de La Plata, señaló que la cepa de Treponema hallada difiere de las que infectan a los humanos en la actualidad. Además, destacó que esta cepa ancestral ofrece una oportunidad única para comprender la evolución de estas enfermedades y su impacto en las sociedades a lo largo del tiempo.

El investigador plantea preguntas claves derivadas del descubrimiento: “¿Cómo evolucionaron estas especies para infectar a los humanos y qué otros reservorios animales podrían haber existido? ¿Otros animales llevaron y transmitieron este patógeno a los humanos?”.

Además de su contribución al entendimiento de las enfermedades infecciosas prehispánicas, el estudio proporciona valiosos datos para la reconstrucción de una historia evolutiva más profunda. Al considerar factores sociales, culturales y ambientales, se exploraron las transformaciones de estas bacterias a lo largo del tiempo, brindando una perspectiva única sobre la interacción entre los patógenos y las comunidades humanas en la antigüedad.