La actividad cervecera levanta cabeza y reactiva a la región

Entre hoy y mañana se desarrollará la “Copa 3 Ciudades” en Berisso, una competencia para elegir las mejores cervezas artesanales. Llegaron jueces y cerveceros de todo el país.

La actividad cervecera en la región comienza a reactivarse a muy buen ritmo y la posibilidad de desarrollar competencias colabora, no solo con el sector, sino también con otros rubros amigos.

Entre hoy y mañana se desarrollará la cuarta edición de la “Copa 3 Ciudades” en Berisso, que convoca a productores y jueces de todo el país y de naciones vecinas; una fecha clave para el rubro.

“Superamos las muestras de la edición anterior, vamos a contar con 400. Estamos contentos porque estamos trabajando mucho para un evento que tiene relevancia a nivel nacional. Vienen jueces de toda la Argentina, eso está bueno porque muestra el interés en la competencia”, manifestó a diario Hoy Gabriel Montenegro, presidente de la Asociación Cerveceros de Berisso y organizador del torneo.

El productor explicó que la competencia se divide en dos sectores: por un lado, la categoría home, de cerveceros caseros, que aportarán 50 muestras; y por otro lado la de profesionales, que presentarán 350 muestras. En esta ocasión compiten cervecerías de todo el país y habrá muestras de Brasil, Colombia y Uruguay. “Si bien se trata de un torneo para cerveceros, lo cierto es que se beneficia a otros rubros como el turismo, porque se llenó un hotel local con los jueces y participantes; además viernes y sábado va a haber visitas a fábricas de la región, lo que repercute en los restaurantes, en los que traen la vajilla, el que vende las copas y los trofeos”, destacó Montenegro.

Luego de que se definan los ganadores, la entrega de premios será el 1° de abril en el club Almafuerte, donde habrá degustación de las cervezas y el público con la entrada podrá recorrer todas las barras y degustar la que quieran.

Desde el sector de la producción destacan esta reactivación luego de lo que fue la crudeza de la pandemia para el sector, en especial la primera etapa en donde se limitó la circulación y apertura de bares. “Tuvimos dos años muy duros por la pandemia. Vendíamos casi toda la producción a los bares, empezamos a hacer delivery y encontramos un nuevo mundo haciendo botellas. Lo veo como algo positivo que quedó, porque en la mesa de la familia que no puede ir a un restaurante puede acceder igual a una botella de cerveza por el delivery. Donde antes llegaba una industrial, ahora llega una artesanal”, analizó Montenegro.

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