La relación entre dos gigantes del pensamiento occidental

Charles Darwin vivía a veinticinco kilómetros de Londres, donde vivía Karl Marx. Marx había leído minuciosamente El origen de las especies, en tanto que Darwin leyó en alemán buena parte de El Capital.

Isaiah Berlin cuenta que Marx tenía la intención de dedicarle su obra más famosa a Darwin, pero este lo disuadió por carta: “preferiría que el volumen no estuviese dedicado a mi persona”. Esto no iba en menoscabo de la obra, según el propio Darwin: “Aun así le agradezco el honor de enviarme su libro. Aunque nuestros estudios han sido tan diferentes, pienso que ambos deseamos la ampliación del conocimiento y así contribuir a largo plazo a la felicidad de la humanidad”.

Friedrich Engels dijo en el cementerio de Highgate en Londres, cuando fue enterrado Marx: “Así como Darwin descubrió la ley de la evolución en la naturaleza, Marx descubrió la ley de la evolución en la historia”. Es sabido que al entierro de Marx asistieron solo once personas, una de las cuales era E. Ray Lankester, el principal discípulo de Charles Darwin.